La Policía continúa buscando la cabeza de una mujer que fue asesinada por su marido, quien luego le cortó la cabeza con una sierra eléctrica, se desató de ella y se suicidó.
Los hechos ocurrieron el 16 de junio en la localidad madrileña de Soto del Real, cuando el asesino, Jorge Ramón, un expolicía ya jubilado, tiroteó a su mujer, de 63 años, en su casa y luego le cortó el cuello con una sierra eléctrica en el garaje.
Al parecer, el hombre abandonó la vivienda con la cabeza de su mujer, pero no se sabe qué hizo. La Guardia Civil ya ha acorralado toda la casa en busca de la cabeza de la mujer, pero no la ha encontrado. También están analizando el teléfono móvil del hombre para intentar reconstruir sus pasos.
Tras deshacerse del jefe de la mujer, el autor de los hechos regresó a casa, subió a una de las plantas superiores de la vivienda y se suicidó con la misma arma que había usado para matarla a ella.
Según el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, la pareja estaba en trámites de separación. El hombre fue agente de la Policía Municipal, pero tras darse de baja del cuerpo se le retiró el arma reglamentaria. La escopeta con la que mató a su mujer era de uso personal.