Queda poco para que acabe la actual legislatura. ¿Qué valoración hace de estos cuatro años?
Ha sido un mandato complicado porque se han superpuesto dos vertientes políticas. Por un lado la política de carácter más nacional, que ha pesado muchísimo en cierto tipo de decisiones, y por otro la política que es básicamente local. En este último término sí hemos sufrido una falta de confianza dentro de los miembros del equipo de gobierno que ha llevado a una parálisis de las acciones municipales y eso se ha notado bastante. Ciertas acciones no se han podido sacar adelante por los diferentes puntos de vista de los miembros del equipo de gobierno. Esto ha sido una mala noticia para el municipio porque hemos perdido cuatro años.
Una de las grandes polémicas ha sido la guerra de banderas en el Ayuntamiento. ¿Qué opinión tiene?
Yo no hablaría de guerra de banderas porque no soy partidario de llevar ciertos temas como fuente de conflicto municipal. El tema de las banderas y los lazos amarillos son cosas que deberíamos dejar un poco a un lado cuando hablamos de política local porque lo que quiere la gente es, por ejemplo, que se gestione bien la limpieza de la ciudad. El hecho de qué bandera haya en el Ayuntamiento es secundario, pero lo deja de ser cuando no representa a una parte de la población.
Lo que ha pasado en Cambrils es que hubo un intento de una parte del gobierno de romper el principio de neutralidad de la administración pública. Soy de los que piensan que todo el mundo es libre de manifestar su opinión política, pero lo que no se puede hacer nunca es usar las instituciones públicas para hacerlo. Nosotros presentamos los recursos necesarios y entramos en un conflicto en el que, incluso, terminó regulando el duelo municipal para acabar sacando una bandera que estaba a media asta. Algo que es bastante absurdo. Pero finalmente vamos a conseguir los objetivos siguiendo correctamente la normativa.
Ha sido una legislatura que, desgraciadamente, ha estado marcada por el atentado terrorista de 2017. ¿Cómo ha afectado al municipio?
Seguramente es el hecho más lamentable que hemos vivido en la historia reciente de Cambrils. Nos situaron en el punto focal de una noticia junto con Barcelona, pero si comparamos cómo enfrentaron las dos ciudades esta situación veremos que, mientras en Barcelona se aprovecharon aquellos actos para hacer reivindicación política, en Cambrils hubo una gran unidad que se notó en la calle. Hicimos una gran manifestación donde participó todo el mundo, todas las fuerzas políticas, gente de Madrid y Barcelona, y no hubo ningún enfrentamiento. Teníamos muy claro que estábamos diciendo no al terrorismo. Y eso marca el talante de los camaristas.
Posteriormente creo que no ha habido una gran manifestación directa. Aquella noche la recuerdo perfectamente porque yo viví a unos 150 metros del Náutico y oí los disparos, pero pensaba que eran petardos. Cuando me avisaron desde el Ayuntamiento, saqué la cabeza por la ventana y vi todo el paseo lleno de policías. Entonces nos recomendaron no salir de casa. Pero una vez pasado el atentado y la incertidumbre de los días posteriores prácticamente ya no se notaba. Es cierto que hubo un descenso en la reserva de hoteles y apartamentos turísticos debido a la psicosis generalizada, pero al cabo de un mes ya se había recuperado y, más allá de la herida social que dejó, no ha habido ninguna afectación especial.
¿Qué problemas tiene Cambrils como ciudad?
Cambrils tiene muchos problemas. Por un lado tenemos el tema de la estación de tren que lleva parado mucho tiempo, aunque las responsabilidades son generalizadas. Lo que es cierto es que el proyecto estaba en marcha pero no tenía ningún tipo de presupuesto y no fue hasta que entró Mariano Rajoy en el gobierno que se hicieron estas atribuciones económicas y se construyó el tramo que quedaba pendiente. Hoy en día estamos a la espera de la solución de la vía única en el tramo hasta Castellón y del tema de la Intermodal de Reus. Que ya no es de infraestructuras sino de decisiones políticas.
Por otro lado, Cambrils ha sufrido un envejecimiento muy acusado de sus infraestructuras con aceras en muy mal estado. También tenemos muchos problemas de vialidad y de aparcamiento. Además, ha habido un descenso de calidad del servicio de limpieza pese a que hace un año y medio se hizo una nueva licitación y se incrementaron los costes de este servicio. Esto ha afectado a la recogida de basuras, con muchos problemas en cuanto a los contenedores de basura. En cuanto a la seguridad, el gran problema son las ocupaciones, sobre todo, en zonas residenciales que han provocado algunos conflictos con los vecinos.
Es la segunda vez que es cabeza de lista. ¿Es optimista de cara a las elecciones?
Bastante más que hace cuatro años. Hoy en día la gente vota muy en clave siglas, pero Cambrils tiene algunas particularidades que se tienen que poner sobre la mesa. Habrá un espacio muy fragmentado y si se analiza en clave nacional, se presentan bastantes más partidos en la franja independentista. Por otro lado, hay mucho más partidos de izquierdas. Además, en torno al 15% de los camaristas votan a partidos municipalistas y el hecho de que haya unas elecciones generales un mes antes creo que difícilmente ayudará a estos partidos a tener un buen resultado porque polarizará mucho la campaña en términos de programa nacional.
¿Cuál será el pilar básico del programa electoral del PP?
Con los cuatro años de parálisis que hemos tenido tenemos que hacer un plan de choque importante en cuestión social, económica, de actividades o de limpieza porque cuando no se hace nada el tema va pasando y los problemas se van volviendo cada vez más complicados. Durante este tiempo en la oposición hemos ido haciendo propuestas al equipo de gobierno que pensábamos que no podían esperar.
Por ejemplo con el polígono Belianes, que es uno de los problemas históricos del municipio. Empezamos un proceso de legalización de actividades porque la gente que tenía una actividad no la podía legalizar porque al no haber ciertas conexiones y no tener caudal de agua no les podían dar la licencia. Vamos a conseguir solucionar este problema y vamos a poner en marcha una campaña de regularización. Pero eso obligaba a los empresarios a ponerse al día en la normativa y pensamos que era prioritario ayudarles. Por este motivo, hicimos una alegación a los presupuestos para incorporar una partida para subvencionarlos y el gobierno lo aceptó.
Como esta política tenemos muchas. Tenemos que hacer un plan de choque para la actividad local en el ámbito de tenderos. Cambrils ha tenido un gran envejecimiento debido a la falta de inversión provocada por la crisis económica y ahora hay que revivir y llevar la ciudad hacia adelante. Pretendemos llevar a cabo un plan de mejora de aceras y viales, mejorar la limpieza porque vivimos del turismo y debemos cuidar nuestra imagen o mejorar la seguridad para tener más tranquilidad. Tenemos solución para todos estos problemas.
¿Cuál es el eje principal en el que se debe sustentar el crecimiento futuro de Cambrils?
Actualmente el peso fundamental de la economía camagüeyana es el turismo y debemos seguir siendo fuertes y competitivos en nuestro sector. En este sentido, tenemos un buen Patronato de Turismo y una oferta turística importante sustentada sobre todo en una gastronomía referente en toda España, lo que es un punto de salida importante. Ahora bien, si nos dormimos, existe el riesgo de que esto se vaya perdiendo poco a poco. Lo que nos preocupa de este tema es que se está perdiendo esa imagen de restauración de calidad y los grandes restaurantes de primera línea marítima se están teniendo que ajustar a la realidad e, incluso, algunos han acabado desapareciendo. Tenemos que apostar fuerte por el turismo como motor económico.
Eso no significa que se tenga que dejar de lado la industria. Desgraciadamente ahora no tenemos porque el polígono todavía no está resuelto. Tenemos que hacer políticas para solucionar definitivamente este problema e impulsar las fases que quedan pendientes para conseguir atraer más inversión. Con estas dos figuras tendríamos una buena carta de presentación de cara al futuro. Además, un tercer eje podría ser el polígono comercial de Vilagrassa, que lleva muchos años calificado y no funciona.
La venta ambulante ha sido un problema habitual en Cambrils en los últimos años. ¿Tienen prevista alguna acción para ponerle fin?
Es un problema gravísimo. Ha supuesto problemas de orden público en el pasado y los llevará en el futuro. La problemática del top manta es que los municipios no tenemos herramientas suficientes para combatirlo. Lo que necesitamos es una política migratoria clara que resuelva los problemas a escala masiva. El problema es que nosotros nos encontramos con un conjunto de personas que están desarrollando una actividad ilegal en la calle y tampoco podemos cerrar los ojos.
Nosotros hemos hecho una propuesta, que seguramente no se podrá llevar a cabo antes de terminar este mandato, para crear un cuerpo de agentes cívicos que tengan una función desincentivadora del top manta, porque lo que no quieren los vendedores es que haya presencia policial. Por lo tanto, pensamos que tener una serie de agentes cívicos contribuiría a ello.
Para terminar, ¿con quién estaríais dispuestos a pactar?
La política de pactos no depende de una voluntad previa. No podemos pactar si no sabemos los resultados. Actualmente ciertas combinaciones son imposibles porque hay ciertas líneas rojas que son muy potentes. Esto hace que determinadas fuerzas políticas queden proscritas en la política de pactos. Por lo demás, nosotros siempre nos hemos mostrado como un partido bastante pragmático y eso nos ha traído problemas. La realidad, sin embargo, es que en los municipios no existe la posibilidad de repetir elecciones y eso obliga a cerrar acuerdos que a veces son complicados. De hecho, diría que históricamente en Cambrils todo el mundo ha pactado con todo el mundo.
Preferiríamos gobernar en solitario, pero sabemos que es difícil. Si tenemos que pactar, nosotros no pisaremos nuestras líneas rojas y, por lo tanto, todos aquellos que lleven a su programa fines que hoy en día estén fuera de la norma no podrán pactar con nosotros. Dicho esto, pactaremos con todos aquellos que estén dispuestos a sentarse con nosotros y a hablar de programa local, porque nuestra finalidad es llevar lo mejor a Cambrils.
