lunes, 17 de junio de 2024
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Defensa, competitividad, medio ambiente y migración centran las propuestas de los partidos europeos para las elecciones

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Defensa, competitividad, políticas sociales, medio ambiente y migración. Estos son los principales puntos recogidos en los manifiestos electorales de los principales partidos europeos de cara a las elecciones del 9-J. Los conservadores son los que más peso dan a la defensa en las propuestas electorales, mientras los progresistas se limitan a apostar por una mejor cooperación en este ámbito. En economía, populares y liberales ponen el acento en el impulso de la competitividad, mientras socialdemócratas, Verdes y la Izquierda tienen el foco en las políticas sociales. Del mismo modo, los conservadores reivindican la agenda verde como oportunidad económica, mientras los progresistas defienden medidas para ayudar a los más vulnerables en la transición.

Partido Popular Europeo

En el manifiesto electoral, el Partido Popular Europeo destina buena parte al ámbito de la defensa y se reivindica como “el único partido que ha mostrado consistentemente su voluntad para promover una defensa europea fuerte”. Los populares europeos defienden crear un Consejo de Seguridad europeo en el que también participen países extracomunitarios como Noruega o el Reino Unido. También apuestan por crear la figura del comisario de Exteriores de la UE, en sustitución del actual alto representante para la Política Exterior, e incrementar la inversión en defensa.

En migración, los populares europeos quieren endurecer los controles y aumentar la cooperación con países terceros, replicando acuerdos como el de Túnez, así como triplicar a los agentes de Frontex. Una de las cuestiones más polémicas es la apuesta por enviar a los solicitantes de asilo a “países terceros seguros” para que se sometan allí al procedimiento de asilo.

En el ámbito económico, los populares europeos hacen especial hincapié en la competitividad europea para “impulsar” la economía con una “Europa que proteja sus intereses”. El manifiesto también reivindica “preparar” la economía para los “nuevos retos” y reducir la burocracia para las empresas, así como crear un comisario específico para pymes.

El apartado medioambiental, que ha dividido durante la legislatura a los populares europeos, reivindica que las medidas verdes pueden ser una “oportunidad para construir la futura prosperidad” y apoyar a la industria “en la transición”. “Creemos que esta transición es esencial para el futuro de la competitividad”, apunta el texto.

Socialdemócratas

En el ámbito medioambiental, el S&D apuesta por “vincular las políticas sociales y ecológicas” e invertir en energías renovables y eficiencia energética, así como por una reforma del mercado de la energía que “garantice la estabilidad y asequibilidad de los precios”. También defienden “reforzar” la política agraria común de la UE “para apoyar a los agricultores” y “mejorar sus ingresos”. “Nuestra lucha a favor del Pacto Verde Europeo es también una lucha por mejorar la vida de los agricultores”, indica el manifiesto.

En migración, el S&D defiende que la aplicación del Pacto Migratorio y de Asilo debe “respetar los derechos humanos y la dignidad de las personas” y ofrecer “procedimientos justos y respetuosos” a los migrantes. Además, quieren crear una misión europea de búsqueda y salvamento en el Mediterráneo.

En cuanto a la economía, los socialdemócratas defienden un plan de inversiones para las transiciones ecológica y digital y una estrategia para impulsar los productos hechos en la UE. Además, reivindican el “no a la austeridad” y que la UE ayude a los países en políticas sociales, por ejemplo para luchar contra el paro.

Finalmente, en el ámbito de la defensa, los socialdemócratas apoyan “desarrollar la industria europea de la defensa” con un “gasto más específico e inteligente y más compras conjuntas de materiales de defensa”, pero centran también su posicionamiento en el “refuerzo” del papel diplomático de la UE a nivel global.

Verdes

El manifiesto electoral de los Verdes es el más extenso. Comienza con políticas ecologistas y defiende un Pacto Verde Social con “inversiones masivas” para impulsar tanto la transición ecológica como los “estándares de vida” de los ciudadanos, que, remarca, han sido “golpeados fuertemente” en los últimos años. También defienden avanzar la neutralidad climática de la UE para que se alcance ya en 2040, 10 años antes del objetivo fijado.

El texto refuerza la idea de que la transición verde debe ir acompañada de medidas sociales para hacer las vidas de los ciudadanos “más seguras, felices y sanas”. Por ejemplo, los ecologistas defienden tener una “red fuerte de seguridad social” y hacer permanente el programa SURE de apoyo a los trabajadores. También apuestan por fijar unos ingresos mínimos en la UE para “establecer un nivel adecuado de apoyo” en cada uno de los países y que se estudie la renta universal básica.

En defensa y seguridad, los Verdes apuestan por profundizar la cooperación militar en la UE y aumentar las capacidades diplomáticas del bloque, así como desarrollar una Unión de la Seguridad que tenga en cuenta “las seguridades humanas y las necesidades de la gente”. También apuesta por “reforzar y profundizar la cooperación” con la OTAN.

En migración, los Verdes defienden unas políticas que “reconozcan la contribución inmensa que los migrantes hacen a las sociedades” y “replicar” el sistema de protección temporal inmediata dada a los ucranianos por la invasión rusa. También apuestan por crear visados europeos para defensores de derechos humanos y medio ambiente, para dar protección legal a los desplazados por crisis climáticas y desastres medioambientales y por crear una misión de búsqueda y rescate en el Mediterráneo. Por otro lado, rechazan los acuerdos migratorios “sucios con dictadores”.

Liberales

El manifiesto de los liberales de Renovar Europa tiene como primer aspecto la defensa, que considera “clave para la prosperidad”. Defiende aumentar las capacidades en defensa, desde la investigación hasta la cooperación militar y “reforzar la defensa de la UE para que se refuercen tanto la de la OTAN como la europea”. “Nuestro foco debería estar en la defensa en los próximos cinco años”, indica.

En el ámbito económico, se centran en “recuperar la competitividad” de la UE. “La próxima Comisión Europea debe ser la ‘Comisión de la Inversión'”, remarca el texto, que también defiende que hay que atraer inversión privada a Europa para que sea “más competitiva y sostenible”. “Reforzar la economía sirve también para mejorar la vida de la gente”, indica.

En cuanto al medio ambiente, Renovar Europa no plantea ninguna propuesta más allá de implementar el Pacto Verde, que, reivindica, ha “fijado el camino para una transición económicamente viable a un futuro sostenible”. Además, los liberales apuntan que el clima y los campesinos “son dos caras de la misma moneda” y que su principal “peligro” es el cambio climático. “No tenemos que morder la mano que nos da de comer”, dicen.

En migración, el manifiesto defiende que es necesaria “claridad y estabilidad” legal para quienes buscan refugio en la UE y “compromiso para evitar las cuestiones que fuerzan a la gente a marcharse de su casa”. Apuestan por estudiar la creación de “vías económicas legales” para que “las economías europeas puedan tener la mano de obra necesaria para su crecimiento”.

Conservadores y Reformistas Europeos

En el ámbito económico, la extrema derecha de los Conservadores y Reformistas Europeos defiende “reducir las barreras” dentro del mercado único para acabar con la” regulación sofocante” para las empresas. El grupo apuesta por “reducir la burocracia que no tiene sentido” y las “leyes innecesarias” y por acuerdos de libre comercio con países terceros para que los productos sean “más baratos” para los consumidores europeos. También subraya que las normas europeas de déficit y deuda “no es la mejor manera de recuperar la competitividad”.

En migración, el grupo se erige como la “voz de la razón” en el Parlamento Europeo en “seguridad interior y exterior”. “Es necesario un sistema migratorio que respete la voz y los deseos de sus estados miembro y de los ciudadanos”, dice el manifiesto, que defiende también incrementar la expulsión de migrantes en situación irregular e incrementar el apoyo a los estados.

El manifiesto electoral de los Conservadores y Reformistas Europeos también hace especial énfasis al “respeto de la soberanía” de los estados. “La UE ha ido demasiado allá”, dice. El grupo defiende una UE concebida como “comunidad de naciones que cooperan en instituciones confederales en áreas en las que tienen los mismos intereses”. Además, defiende “un nuevo establecimiento institucional” en la UE que “reconozca que la legitimidad democrática de la Unión deriva principalmente de sus estados miembro”.

En cuanto al medio ambiente, el grupo defiende que son necesarias medidas contra el cambio climático, pero que no causen un “coste innecesario” ni a las empresas ni a los estados miembro. Ante “objetivos irrealistas”, los Conservadores y Reformistas Europeos defienden una “estrategia gradual que pueda tener el apoyo de todos los estados”.

Identidad y Democracia

El grupo de extrema derecha Identidad y Democracia es el único que no tiene manifiesto electoral para el 9-J. Se limita a referenciar una breve declaración aprobada por el grupo en junio de 2022 que subraya la “superioridad del concepto de soberanía nacional”. El grupo critica la integración europea, que considera una “centralización” para establecer un “estado unitario que sustituya a los estados miembro”, y critica que la UE tiene “abierta una guerra contra sus estados miembro” por el mecanismo que condiciona los fondos europeos al respecto del estado de derecho.

Identidad y Democracia también critica que la UE tiene “abiertas del fronteras de una manera cada vez más extrema” y “la obsesión” europea, dice, con “todo aquello que promueve la inmigración masiva”. Así, defiende controles “más estrictos” en las fronteras exteriores. El grupo también se opone a más integración en defensa.

La Izquierda

En defensa, la Izquierda rechaza que “Europa se convierta en el escenario de una nueva Guerra Fría” y que participe en una “carrera armanentística”. “Queremos que Europa decida sobre su seguridad de forma autónoma e independiente de Estados Unidos”, dice el manifiesto, que considera que Europa “necesita un programa político para la paz, la seguridad y el desarme” y no “militarizarse”. En este sentido, apuestan por reducir el presupuesto destinado a defensa y rechazan “la expansión de la OTAN”.

En el ámbito económico, la Izquierda defiende “alejar la economía del crecimiento sin límites” y apuesta por un “gran plan de inversión europeo para que las empresas y los servicios públicos creen nuevos puestos de trabajo y ofrezcan formación para ocuparlos”. También apuestan por suprimir las reglas de déficit y deuda, convertir el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia en permanente y por aplicar un impuesto a las grandes fortunas.

En cuanto a las políticas sociales, apuestan por que la UE obligue a los estados a fijar límites al precio de los alquileres y prohibir los alquileres temporales y desahucios de viviendas habituales. También a reservar el 7% del PIB de la UE a educación, investigación e innovación y el 2% a cultura.

En materia medioambiental, la Izquierda quiere una “transformación ecológica, energética e industrial” y para avanzar a 2035 el objetivo de neutralidad climática de la UE. “Una transformación medioambiental radical debe ir acompañada de la lucha por la justicia social y la lucha contra la dominación del mercado para conseguir una transición justa hacia economías verdes”, remarca el texto. La Izquierda también reivindica “promover un nuevo contrato social ecológico” y cambiar el sistema de asignación de la PAC para “redirigir” las ayudas a la agricultura “sostenible y ecológica”.

¿Quiénes son los candidatos europeos?

Aunque los ciudadanos de cada país votan las candidaturas de los partidos de su estado, los grupos europeos, a los que pertenecen la mayoría de los grandes partidos, han designado un candidato a presidir la Comisión Europea. Con el sistema ‘spitzenkandidaten’ se busca vincular el resultado de las elecciones al Parlamento Europeo a la presidencia del ejecutivo comunitario.

Ahora bien, en la práctica este sistema no está garantizado. Sí funcionó en 2014 con la elección del luxemburgués Jean-Claude Junker –candidato del Partido Popular Europeo-, pero fracasó en 2019 con la de Ursula von der Leyen, que no era la candidata de los populares europeos.

En estas elecciones, Von der Leyen sí es la candidata del Partido Popular Europeo a presidir la Comisión Europea. El candidato de los socialdemócratas es el actual comisario de Trabajo, el luxemburgués Nicolas Schmit, con un perfil más desconocido para la opinión pública.

Por los Verdes, el neerlandés Bas Eickhout y la alemana Terry Reintke son los candidatos a presidir la Comisión Europea, mientras la Izquierda ha designado como candidato al austríaco Walter Baier. Los tres principales partidos que forman parte del grupo de los liberales de Renovar Europa han nombrado a Marie-Agnes Strack-Zimmermann (Partido de la Alianza de los Liberales y Demócratas por Europa), Sandro Gozi (Partido Demócrata Europeo) y Valérie Hayer (Renacimiento), que es el actual líder del grupo en el Parlamento Europeo. Raül Romeva es el candidato de la Alianza Libre Europea a presidir la Comisión Europea, mientras los grupos de extrema derecha Identidad y Democracia y Conservadores y Reformistas Europeos no han designado cabeza de lista.

Los partidos catalanes en la Eurocámara

En las elecciones al Parlamento Europeo, la circunscripción electoral es única en todo el Estado, con lo que los ciudadanos votan las mismas listas de candidatos en todas las ciudades y comunidades autónomas. La mayoría de los grandes partidos están adscritos a un grupo europeo, a excepción de Junts, que se mantiene en los no adscritos a ninguna familia europea.

ERC forma parte de la Alianza Libre Europea, que tiene a Romeva como candidato a presidir la Comisión Europea, y que tras las elecciones se une a los Verdes en el grupo europarlamentario. El PSC y el PPE forman parte de las dos grandes familias europeas, la socialdemócrata del S&D y la del Partido Popular Europeo. Los Comunes han formado parte de los Verdes esta legislatura, mientras Vox está integrado en los Conservadores y Reformistas Europeos.

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