El Ayuntamiento de Barcelona proyecta una remodelación de la plaza de Pablo Neruda, en el distrito del Eixample, para generar un espacio de uso vecinal que dinamice el uso que tiene actualmente. Según el consistorio, el objetivo es resolver deficiencias de la plaza, como una pista de patinaje que hay en la zona central, demasiado cerrada, la falta de juegos y de zonas de sombra o los actuales espacios poco favorables a la socialización.
El Distrito del Ensanche ha explicado este jueves en una sesión informativa el proyecto que se ejecutará, después de haberlo trabajado con el vecindario del Fort Pienc y la Sagrada Familia, escuelas y el colectivo patinador. La actuación tiene un coste de unos 2 millones y se prevé iniciar las obras durante el primer trimestre de 2026.
El anteproyecto prevé integrar en la zona centra un circuito de ‘pump track’ y un nuevo espacio de entrenamiento para practicar patinaje, hockey y otros deportes. Se integrarán, también, diferentes juegos para niños de diversas edades, como un rocódromo, una pizarra, juegos pintados en el suelo, o una mesa de ping-pong.
La intervención también quiere mejorar los accesos, diseñar espacios inclusivos y seguros, y crear un recorrido accesible. También están previstas nuevas zonas de sombra, con arbolado y telas, y se mejorarán la vegetación y las condiciones de los árboles.