Una incidencia en un convoy registrada la tarde de ayer lunes provocó la interrupción durante dos horas y veinte minutos del suministro eléctrico y, por tanto, del servicio ferroviario de alta velocidad entre Madrid y Valencia, sembrando el caos en la estación madrileña de Chamartín.
Uno de los incidentes más graves se registró en un convoy de AVLO (marca de bajo coste de alta velocidad de Renfe) que quedó parado en el túnel que va desde Atocha a Chamartín durante dos horas, sin luz, y por tanto sin aire acondicionado.
Según explicaron los pasajeros del tren en las redes sociales, la avería tuvo lugar hacia las dos y media de la tarde, cuando el tren estaba a pocos centenares de metros de la estación de Atocha.
El problema es que dos horas parados y sin ningún tipo de ventilación, hizo que la temperatura se enfilara, dentro del convoy, hasta 40º C y el aire se enrareciera, lo que provocó numerosos desmayos y ataques de nervios entre algunos pasajeros.
Al no ser practicables, las ventanas de estos trenes, un pasajero decidió abofetear una con el martillo de emergencia, para que entrara un poco de aire dentro del vagón.
Cuando al cabo de más de dos horas, hacia las dos y media, se ha recuperado el suministro eléctrico y el tren ha llegado a la estación, hasta 9 personas han requerido asistencia médica. Los pasajeros han lamentado el total abandono de Renfe en una situación de peligro como esta.