La Paeria de Lleida decidió ayer cerrar los accesos al interior del parque de La Mitjana, como medida de precaución y para facilitar las tareas de control de posibles revuelos del incendio que se produjo el miércoles en el recinto, con más de cinco hectáreas afectadas.
La entrada del parque de la Mitjana de Lleida ha quedado precintado parcialmente con varios cordones policiales porque a estas alturas, a pesar del descenso de la temperatura, todavía hay riesgo de revuelo por la presencia de brasas, por la yemas de chopos y sauces, y por el viento.
Esta medida se mantendrá mientras haya riesgo de incendio y sólo se mantendrá accesible el paseo de entrada principal desde Pardinyes y la zona de la Carbonera, con la balsa y los juegos infantiles.
LaCiutat.cat ha realizado una visita esta mañana al parque, comprobando que la puerta de acceso estaba abierta, aunque una señal impide la entrada hacia el interior de la zona boscosa, ni desde la entrada principal ni desde cualquiera de los otros accesos al parque, como son los del Camino de Grenyana, el Camino del Río y el clamor de las Canales.
Justo antes de entrar en la zona boscosa, una señal con un cartel: “Prohibido el acceso provisionalmente. Riesgo extremo de incendio forestal”.
Hasta cuatro dotaciones de los Bomberos de la Generalidad se mantuvieron a lo largo de la jornada de ayer en la zona para remojar zonas en las que todavía salía humo, especialmente en puntos con mala accesibilidad en los que se el helicóptero hizo el miércoles varias descargas de agua. “Se trata de un perímetro bastante grande en cuyo interior hay zonas sin quemar”, afirmaron los Bomberos. Fue el cuarto incendio registrado en la misma zona desde el viernes pasado.
En el dispositivo también participaron el GEPIF (Grupo Especial de Prevención de Incendios Forestales), la Guardia Urbana y los Agentes Rurales. En el caso de la Urbana, los agentes recorrieron la zona para evitar que hubiera alguien que pudiera quedar atrapado. El fuego calcinó unas 5,2 hectáreas, según la primera estimación de los Agentes Rurales, que investigan sus causas.
La concejala de Seguridad, Movilidad y Civismo, Cristina Morón, explicó ayer que desde el Ayuntamiento de Mérida ya hace meses que se están llevando a cabo medidas de mantenimiento y protección, así como ir remplazando la zona para evitar que se vuelva a propagar el incendio y apuntó. pedir responsabilidad a todos aquellos leridanos y leridanas fumadoras el hecho de no lanzar colillas al suelo.
La principal zona afectada por el incendio es el brazo secundario de la margen derecha del río y el embarcadero, así como la zona junto a la balsa grande al otro lado del río. La afectación en la vegetación es mayoritariamente superficial y se centra en las cañas, el decabosque y el matorral, con algunos pies de árboles quemados o intensamente afectados.
