Los Mossos d’Esquadra han detenido en Riudarenes (Garrotxa) a un hombre de 29 años y que tenía varias órdenes de arresto por violencia machista.
El arrestado, sin embargo, se había escapado de la policía en un traslado desde la comisaría de La Bisbal d’Empordà al hospital de Palamós (Baix Empordà) unos días antes.
Los hechos se produjeron el pasado 27 de agosto, cuando los Mossos prepararon un dispositivo para detener al hombre, dando respuesta así a las órdenes judiciales de arrestarlo.
Los agentes lo pudieron capturar y se lo llevaron a la comisaría de La Bisbal.
Allí el hombre se lesionó expresamente en el brazo y los médicos requirieron que se lo llevara al hospital, ya que la intervención que necesitaba no se podía hacer en la comisaría.
A eso de las tres de la tarde, durante el traslado de vuelta hacia las celdas de la comisaría y aprovechando que por la intervención que le habían hecho iba sin amanecer, el detenido saltó por la ventana del coche patrulla y se escabulló sin que los agentes llegaran a capturarlo de nuevo.
En seguida se va a poner a trabajar la unidad de investigación que descubrió que este martes sería en Riudarenes.
Entonces, se activó un operativo para echarlo, pero el hombre se enfiló a un tejado para intentar huir de los policías que lo rodearon.
Como medida de precaución se avisó al cuerpo de Bomberos, dado que el hombre estaba enredado en un tejado, para intentar rescatarlo.
Finalmente, el detenido desistió gracias al proceso de mediación con los Mossos, que una vez abajo lo detuvieron y se lo llevaron a las dependencias de la comisaría de Olot.
Este mismo miércoles ha pasado a disposición del juzgado de guardia de Olot.