El gobierno ha anunciado que durante los seis meses de aplicación del tributo de la Ley de Impuesto sobre la Inversión Extranjera inmobiliaria en el Principado de Andorra, se han liquidado 6,5 millones de euros.
Se trata de un importe que supera la previsión presupuestaria de ingresos prevista por el Gobierno durante todo el ejercicio de 2024, que era en torno a los 5 millones de euros.
Así lo afirmaron el ministro de Finanzas, Ramon Lladós y la ministra de Presidencia, Economía, Trabajo y Vivienda, Conxita Marsol, en respuesta a la pregunta formulada por el consejero general del grupo parlamentario Andorra Endavant, Marcos Monteagudo, publicada en el boletín del Consejo General.
Sobre esta recaudación, el ministro portavoz, Guillem Casal, ha valorado la suma total, ya que se ha “superado con creces” lo que se preveía para un año en solo unos meses de aplicación del impuesto.
Y cuestionado sobre el hecho de que este gravamen no esté sirviendo para detener la inversión extranjera en inmuebles ha recordado que la ley de crecimiento sostenible que se encuentra a trámite parlamentario va “un paso más allá” para “limitar” esta inversión, reduciendo las unidades inmobiliarias que los extranjeros pueden adquirir e incluso gravando más las plusvalías..
En este sentido, ha reivindicado que en el año y medio de mandato se ha visto la “clara línea trazada en torno a la problemática de la vivienda” por parte del ejecutivo.