Los Mossos d’Esquadra desmantelaron este lunes un cultivo de marihuana en las montañas de Prades (Baix Camp) donde había plantadas 1.800 plantas, que tenían hasta dos metros de altura.
Los agentes detuvieron a tres hombres, dos de 20 años y a un tercero de 33, como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas, de otro de pertenencia a grupo criminal y un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente.
La plantación se encontraba repartida en tres bancales que se encontraban en una zona boscosa de difícil acceso, incluida en el Plan de espacios de interés natural (PEIN) de Cataluña.
En el operativo, los policías también localizaron un sistema de regadío formado por unas tuberías de plástico procedentes de unas balsas de agua.
A pocos metros de distancia, los Mossos observaron un campamento con varias tiendas y tras rodear el espacio, sorprendieron y detuvieron a los tres hombres.
Estos se encargaban de la vigilancia y el cultivo.
En el lugar donde pernoctaban, se encontró alimentos y bebidas, mochilas, ropa y diversos productos fitosanitarios para la protección y el crecimiento de los cultivos.
Los tres arrestados pasaron este miércoles a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Reus.
