La consellera de Cultura, Sònia Hernández Almodóvar, ha inaugurado la Feria Mediterránea, que se celebra en Manresa hasta el 13 de octubre y que se da cita cada año para impulsar la cultura popular y de raíz.
El espectáculo inaugural ha sido ‘Para cuatro jinetes’, de Mucha Muchacha y Los Voluble, que propone una reflexión sobre la tradición. A la inauguración han asistido también el director artístico de la Feria, Jordi Fosas; el alcalde de Manresa, Marc Aloy; la directora general de Cultura Popular y Asociacionismo Cultural, Carol Durán, entre otros.
La consellera ha afirmado que “la Feria Mediterránea es motor del reconocimiento y la renovación constante de la cultura popular y de raíz y una herramienta indispensable para vertebrar y dinamizar la vida cultural del país”.
Sònia Hernàndez ha añadido que “citas como esta son muy necesarias para dar acceso a todos a las artes de raíz conectando cada vez con más públicos y tejiendo complicidades más allá de nuestro territorio. Eso enriquece el potencial de nuestra cultura popular”.
La programación de Feria Mediterránea, este año centrada en la disidencia, presenta 74 propuestas artísticas de música, artes escénicas y cultura popular, de las cuales el 77% con carácter de estreno. La Feria incorpora también el Programa de impulso a la música de raíz, incluido en el Obrador de raíz, un programa de apoyo a los artistas que exploran nuevos caminos a partir de la cultura popular.
Este programa forma parte del apoyo que el Departamento de Cultura da a Feria Mediterránea como mercado estratégico que, durante estos días, se convierte en escaparate para los profesionales para que puedan dar recorrido a sus espectáculos más allá de la cita anual.
La programación 2024 se centra en dos focos. Por un lado, a nivel internacional, se pondrá la mirada en la ribera sur del Mediterráneo, en el Magreb mediterráneo, una zona muy rica y diversa a nivel de artes de raíz tradicional, donde están apareciendo artistas jóvenes que trabajan la tradición desde nuevos lenguajes, aunque muchas veces lo hacen lejos de sus tierras de origen.
Esta diáspora cultural conecta con el otro foco de la programación, las disidencias, motivadas tanto en cuanto a la procedencia, al cuerpo, al género, entre otros, y el proceso creativo de los artistas y su programación. Este concepto de las identidades disidentes será una temática que tendrá destacado protagonismo tanto a nivel artístico como profesional durante la próxima edición de la Feria.