Unos 330 corredores han participado este sábado en la séptima edición de la carrera solidaria Vertical Montserrat, que recauda fondos destinados a proyectos vinculados con niños en riesgo de exclusión atendidas en los centros de Sant Joan de Déu. La cita es la más exigente del Estado, con un recorrido que recorre los 2.180 peldaños de los funiculares de la Cueva y de San Juan, y con un desnivel de 388 metros. Este año, además, se ha sumado un nuevo trazado, bautizado como Milenario, y que ha arrancado desde el pie del Aéreo, con 52 deportistas que han superado un desnivel de mil metros hasta la ermita de Santa Magdalena, con un total de 4,5 kilómetros. La cita también tiene categorías para fomentar la participación de personas con discapacidad.
Bomberos de la Generalitat crearon la carrera en el año 2017 conjuntamente con la Obra Social Sant Joan de Déu, en el marco del proyecto Bomberos con Causa, y desde su creación ya ha recogido más de un millón de euros. Tiene un aforo inicial limitado, dado que la subida se hace por las escaleras de servicio que suben en paralelo a los funiculares de la Cueva y de San Juan.
“Hay que ir de uno en uno, de manera cronometrada, la cita deportiva es única, y es una cita solidaria, porque participando en ella se colabora en una causa social”, ha detallado a la ACN el director de la Obra Social San Juan de Dios, Juanjo Ortega. Los fondos que se recaudan se destinan, de hecho a fines vinculados con la actividad que se lleva a cabo con la canalla.
“La vertical Montserrat intenta favorecer proyectos que van en beneficio de lo que llamamos infancia en riesgo, que es un concepto muy amplio, son niños, algunos con enfermedades crónicas que no tienen cura, y por lo tanto la investigación es un concepto muy amplio”, ha añadido Ortega. “Es muy importante impulsarla, pero también niños que sufren situaciones socioeconómicas muy complicadas, por ejemplo, niños de familias migradas que vienen de países en conflicto bélico o que están huyendo de situaciones que sus países no podrían tener un proyecto de vida”, ha añadido.
Este año, además, se ha realizado una edición extraordinaria coincidiendo con los mil años de la Abadía de Montserrat, bautizada con el nombre de Mil·lenari. “No cada año de nuestra vida podemos celebrar milagros de lugares tan emblemáticos como es la Abadía Montserrat, y para esta ocasión, ¿qué mejor que hacer una carrera extraordinaria?”, ha dicho Ortega. Este año, el embajador de la cita ha sido el periodista de 3Cat y presentador del programa de TV3 “La Selva” Xavier Grasset, que ha asegurado que siempre que se pueda hay que arremangarse para ayudar a causas sociales: “Como yo quiero ir al cielo, qué mejor que ser embajador de la carrera Vertical, que hay relación directa con Montserrat y con el cielo”, ha dicho en tono de broma.
De hecho, Grasset ha explicado que siempre que viaja intenta subir a lugares altos: “Mi meta es Saint Paul’s Cathedral, con 300 peldaños, porque en la Torre Eiffel voy a hacer un tramo también con ascensor, y aquí son 2.180 peldaños, lo he estado rumiando, he pasado todos estos meses decidiendo qué hacía, si puedo o no puedo, y al final pienso que tienen que subir los que están más preparados”, ha añadido.
Una cita colectiva
La cita engloba a personas de diferentes perfiles, con categorías como la Inclusiva o la Infantil. También participan usuarios de Sant Joan de Déu, como en Heikki Palomares, que se trata de una patología vinculada con el oído, y su madre, Montse Sànchez: “El año pasado en Heikki y su hermana participaron en el calendario solidario, y nos llamaron desde Bomberos, en Girona, y venimos preparados, oye?”, ha preguntado la Montse a en Heikki.
La cita ha contado con una amplia participación de bomberos de todo el país. Tres de ellos, de Barcelona, en Marc Coll, el Albert Artigas y en Marc Utrillo, se han estrenado este año y han disfrutado de una subida que han hecho con los 25 kilos que pesa su equipo de trabajo: “Hemos querido apuntarnos a las ediciones anteriores, pero se llenaban muy deprisa las plazas, tienen que crear más”, ha dicho Marc Utrillo.
“Nosotros podemos entrenar en una torre de prácticas que tiene ocho pisos y claro, para muchos, dos mil o tres mil peldaños los haces, pero nunca son seguidos, y aquí la dificultad es que son 2.200 peldaños seguidos, eso es difícil de entrenar si no vienes en un lugar así”, ha añadido Marc Coll.
La Mireia Quirós es bombera de Falset, aunque natural de Sant Cugat del Vallès, y ya hace dos años que queda en primera posición en su categoría. «Cuando estás abajo, dices “por qué estoy aquí, como se me ocurre, lo único que sé es que serán 24 minutos de sufrir, sufrir, sufrir”, pero cuando acabas, como sabes que es por un objetivo solidario, te satisface mucho», ha asegurado.
También participan personas con discapacidad visual como ‘atleta paralímpica Marta Bustos, que iba guiada con un bastón con Paco. “Veo solo de un ojo y no soy ciega total, pero es muy difícil adaptarme a la luz todo el rato, con las sombras, las piedras que hay, acabas con un poco de mal de cabeza”, ha asegurado.
Ganadores
Este año, en la categoría excepcional Milenario, Enrique Santamaría se ha impuesto con un tiempo de 47:15 en modalidad masculina y Laia Montoya con 48:36 en modalidad femenina. En categoría Open, los vencedores han sido Josep Andreu Cortada con 11:42 minutos y Andreza Diaferia con 17:12.
El mejor tiempo conseguido en la categoría Bomberos masculino ha sido para Adrià Duarri de Bomberos de Barcelona, con un tiempo de 17:58 minutos, mientras que en femenina ha vuelto a ganar Mireia Quirós, de Bomberos de la Generalitat en Falset, con un tiempo de 25:12.
En categoría Inclusiva, Edgar Toapanta se ha impuesto con una marca de 18:14, el mejor tiempo en la modalidad visual, y Pere Torramorell con 18:09 en la intelectual. En la modalidad visual femenina, Marta Bustos, ha hecho un tiempo de 25:23.
En cuanto a Infantil, han participado 19 niños y niñas de entre 8 y 15 años acompañados de un deportista adulto. Todos han recibido una medalla.