La Federación Empresarial de Hostelería y Turismo de la Provincia de Tarragona (FEHT) ha cargado contra el Gobierno por el incremento de la tasa turística, que aseguran les hará perder competitividad respecto a otros destinos y pone en peligro la desestacionalización. El portavoz de la entidad, Xavier Guardià, ha expuesto que en algunos casos se triplicará el impuesto, ya que se puede llegar a pasar de los tres euros actuales a diez, sumando el incremento autonómico y el municipal. “Esto es el 25% del precio de una habitación en temporada baja”, ha afirmado. Por su parte, la presidenta de la FEHT, Berta Cabré, ha denunciado que la tasa se ha convertido en “una herramienta recaudatoria de fácil acceso” para las administraciones.
Cabré ha señalado que el impuesto “no se calcula como un porcentaje en función del precio de venta o de la temporada, sino que se aplica como una tarifa fija”. “No tiene sentido que se grabe igual una pernoctación en pleno verano, cuando la demanda es alta, que en temporada baja, cuando el sector hace esfuerzos para mantener la actividad”, ha valorado. A su vez, los empresarios han indicado que los establecimientos deberán decidir entre asumir el coste o repercutirlo a los clientes, con el riesgo de perder visitas en beneficio de otros destinos. Asimismo, han recordado que Cataluña es la única comunidad autónoma del Estado donde se aplica.
Por su parte, Guardián ha cargado contra el ejecutivo catalán porque considera que el cambio impositivo no tendrá el mismo efecto en Barcelona que en otros lugares. En su opinión, Barcelona es una ciudad que no tiene riesgo de perder visitantes, pero que en cambio localidades y destinos costeros y de interior del país sí tienen una competencia más fuerte de otros lugares.
Respecto a la posibilidad de que los municipios puedan ejecutar la opción de aplicar un recargo de hasta cuatro euros por día y habitación, Guardián ha asegurado que de momento no tienen noticias de ningún Ayuntamiento de la Costa Dorada que lo quiera hacer. “Pero la nariz nos dice que normalmente la administración por poco que puede, pone algo, y eso nos preocupa más”, ha manifestado. Con todo, el portavoz ha criticado al Gobierno por haber tomado la medida sin informar de ello y pactándolo con los Comunes, “una formación que no tiene ningún representante de la demarcación en el Parlamento”. “El gobierno socialista dice que está a nuestro lado, pero cada vez que tiene que tomar una decisión turística está en el otro bando”, ha apostillado.
Finalmente, Cabré ha destacado que desde la puesta en marcha de este impuesto hace unos diez años, las administraciones han recibido más de 80 millones de euros recaudados por los establecimientos turísticos de la demarcación de Tarragona. La FEHT ha lamentado también que a partir de ahora el dinero obtenido no se destinará exclusivamente a la mejora del turismo, sino que los ayuntamientos podrán dedicarlos a otras cuestiones.