El movimiento feminista ha vuelto a salir a la calle este 8 de marzo en Tarragona en la marcha unitaria convocada por la Plataforma Feminista y LGBTIQ+ del Camp. Según la organización, la acción ha reunido a unas 3.000 personas, una cifra que la Guardia Urbana ha rebajado hasta los más de 700 participantes. La marcha, que ha acabado en la plaza de la Font, ha clamado contra el patriarcado y la violencia machista bajo el lema ‘Contra el fascismo, más feminismo’. Según Jordina Salvat, miembro de la entidad, “la extrema derecha tembla” ante el avance del feminismo en ámbitos como el social, político o judicial. Durante el recorrido, se han lanzado consignas a favor de la promoción de vidas dignas para todos independientemente del origen, clase o identidad sexual.
El clamor feminista ha vuelto a resonar en las calles de Tarragona este sábado coincidiendo con la jornada del Día Internacional de las Mujeres, que ha reunido a centenares de personas en la marcha unitaria del Camp.. La lucha feminista por afrontar el auge reaccionario de la extrema derecha y el fascismo ha sido el pilar de la acción , que ha comenzado en la plaza Imperial Tárraco.
Durante el recorrido, las participantes han hecho varias paradas en espacios como la audiencia provincial o la sede de Vox, donde se han escuchado consignas en contra a la violencia machista y la extrema derecha. Así, han seguido la marcha por la calle Soler y calle Lleida, para continuar por la Rambla Nova y la Rambla Vella. Finalmente, han llenado la plaza de la Fuente, donde se ha leído un manifiesto.
Desde la Plataforma Feminista y LGBTIQ+ del Camp, la miembro Jordina Salvat ha señalado que el movimiento no hará “concesiones” ante la pérdida de derechos de las mujeres y ha remarcado la necesidad de seguir luchando por conseguir vidas dignas para todos independientemente del origen, clase o identidad sexual.
Consignas contra la violencia machista
La reivindicación de los cuidados también ha estado presente entre los manifestantes. Es el caso de Laura Rovira, quien ha decidido asistir a la marcha junto a sus hijos. . “Hemos venido con familia porque pienso que es importante educar en igualdad, creo que el feminismo es importante para avanzar en un país” , ha indicado. Otros, como la Rosa Maria Molet, han hecho oír su voz en la marcha en recuerdo a la lucha que hicieron sus antepasadas. “Hay que defender los derechos de las mujeres en los juzgados, que no estén a favor de los agresores. Hay que luchar por la igualdad laboral y en contra de la violencia vicaria”, ha añadido.
Al mismo tiempo, la marcha ha tenido un carácter anticapitalista, antirracista e inclusivo. En este sentido, también se ha hecho un llamamiento a favor del pueblo palestino. “Vemos como el auge de la extrema derecha significa un peligro, no sólo para las mujeres, sino también por las personas migrantes, las personas trans, el colectivo LGTBI y tantos otros colectivos. Creemos que es momento de alzar la voz y decirles que no les tenemos miedo”, ha subrayado Judith Llauradó, portavoz del sindicato de estudiantes Libres y Combativas.