El Departamento de Interior ha firmado por un importe de 1,8 millones de euros el contrato con la empresa Sensotran S.L. para el suministro, instalación y mantenimiento de 575 sensores electroquímicos para la detección de sustancias tóxicas en el marco del Plaseqta.
Los aparatos se instalarán en los polígonos norte, sur y en el puerto de Tarragona y detectarán ocho componentes tóxicos diferentes: dióxido de azufre, óxido de etileno, sulfuro de hidrógeno, cloro, amoníaco, cloruro de hidrógeno, fosgeno y acrilonitrilo.
Estas sustancias son las que pueden producir accidentes con nube tóxica que afecte al exterior de las empresas. La empresa dispone de cuatro meses para suministrarlos y luego durante un periodo de cinco meses deberá instalarlos y ponerlos a punto.