El intenso tiroteo que el martes por la noche hizo saltar todas las alarmas al, ya de por sí conflictivo, barrio de La Mina de Sant Adrià de Besòs (Barcelonès) fue iniciado tras la discusión de dos menores de dos clanes familiares enfrentados, momento en el que uno avisó a varios miembros de la familia.
Así lo han dicho varias fuentes conocedoras de los hechos a Europa Press este jueves, que han detallado que las dos familias se dedican al tráfico de drogas, aunque el motivo de la discusión “todavía” no se ha aclarado.
Al mismo tiempo, las mismas fuentes han destacado la mala convivencia –textualmente– de los dos clanes, y han explicado que es “muy complicado encontrar a los responsables porque no se acusan entre ellos ni hay denuncias interpuestas”.
Sin embargo, la policía catalana tiene identificados los dos clanes y está analizando las imágenes grabadas por los vecinos durante el tiroteo para encontrar a los participantes, pero, de momento, no hay detenidos.
Fuentes cercanas a la investigación avisan de que “no será fácil imputarles algún delito”.
El tiroteo se produjo el martes hacia las once de la noche horas en la Calle Venus de la localidad barcelonesa cuando se produjeron unos 150 disparos en un corto periodo de tiempo con tres pistolas y un arma larga.
Como consecuencia, una vecina recibió el impacto de un proyectil que rebotó y le causó un hematoma.