El PSC ha denunciado públicamente que las cámaras de videovigilancia que el Ayuntamiento de Terrassa compró en 2021 para controlar, identificar y sancionar a las personas incívicas que depositan los residuos fuera de los contenedores no han servido para interponer ni una sola sanción. Según el concejal Javier García: «Ballart se gastó 15.000 euros de dinero público en unas cámaras de seguridad que no funcionan».
A finales de 2020, en un contexto de suciedad generalizada en la ciudad de Terrassa, el alcalde Jordi Ballart anunció que lucharían contra la gente incívica y que instalarían cámaras de seguridad para controlar los vertidos ilegales de, principalmente, residuos voluminosos, en las baterías de los contenedores, una práctica que generaba mucha sensación de suciedad. El Ayuntamiento elaboró un mapa de las 10 baterías calificadas de «puntos negros» e identificó otras 20 ubicaciones para futuras instalaciones de videocámaras.
Sin embargo, dos años después, a pregunta del Grupo Socialista, el Gobierno Municipal informó de que «las dos tipologías de cámaras con las que se trabajó, presentaban carencias y problemáticas que limitaban su funcionalidad» y que «su visualización sólo fue posible de forma aleatoria, manual, y por tramos horarios, no siendo viable ni posible la identificación de personas». Además, García afirma que los servicios jurídicos del Ayuntamiento emitieron un informe en el que calificaban de «ilegal» e «ilegítimo» la grabación de la vía pública para controlar vertidos de residuos indebidos.
El concejal del PSC califica este episodio como una muestra más del despilfarro de recursos públicos del alcalde Jordi Ballart: «Esto es un ejemplo de las políticas de Ballart: muchos anuncios y promesas, pero luego demuestra una grave incapacidad de gestión».
El PSC lamenta que «las prisas y el populismo» de Ballart por dar un titular ocasionara un perjuicio económico de 15.000 euros a la ciudad, dado que «esto les llevó a no valorar y evaluar bien las opciones de compra, ya que si hubieran hecho un estudio de mercado o se hubieran informado mejor, seguramente habrían adoptado otra decisión».