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Una nueva especie invasora está empezando a esparcirse por Barcelona. No es la primera vez que se la ve en la capital catalana, y también ha sido aliñada por otras zonas de España, pero los expertos señalan que su presencia está aumentando.
Tal y como recoge ‘TV3’, se han detectado nidos de esta especie de hormiga en el cementerio de Montjuïc, en los jardines de Costa i Llobera y en la misma plaza de Cataluña. Uno de sus rasgos característicos es su “caminar nervioso y errático”, motivo por el cual se le llama hormiga boyante.
Podría ser de origen Americano o Africano, en territorio tropical, aunque se han encontrado colonias por todo el mundo.
¿Es peligrosa la hormiga boyante?
Los expertos consultados por la televisión de Cataluña aseguran que la hormiga boyante no representa un peligro inminente para los ciudadanos, ya no muerde ni es venenosa y tampoco transmite enfermedades.
Sin embargo, su extensión puede afectar a la biodiversidad local y a la agricultura, aunque faltan estudios para terminar de determinar cuál sería su afectación real. De momento, parece que puede convivir con otras hormigas. En cuanto a la economía, no “genera grandes pérdidas”.
Sí puede convertirse en un problema si se convierte en plaga, según explica Jordi Ruiz, responsable de especies invasoras del Departamento de Acción Climática de la Generalitat. Ruiz explica que “pueden acabar con la comida de otras especies” y que “pueden abrochar una estructura subterránea”.
Según el departamento de Medio Ambiente y Sostenibilidad, la hormiga boyante sí puede tener más afectaciones, como su “elevada capacidad destructiva”, el “desplazamiento de otras especies de hormigas nativas y otras especies”, convertirse en una “plaga en edificios e infraestructuras” e incluso convertirse en una “plaga agrícola”.
Buscando la hormiga boyante en otras zonas de Cataluña
La llegada de la hormiga boyante no es nueva, ya se detectaron ejemplares en el Puerto de Barcelona hace cinco años, pero se realizaron varias acciones para controlarla y en el año 2021 se consideró prácticamente erradicada.
Ahora ha reaparecido en diferentes zonas de la ciudad y, según el biólogo Roger Vila de Bionet, se trata de una especie que se esparce muy rápidamente, ya sea a partir de una colonia que empieza a ganar terreno o a través del transporte de mercancías, que las va distribuyendo en otras zonas, donde terminan formando nuevas colonias.
Aparte de Cataluña, al Estado español ya se le ha visto en otras zonas como por ejemplo en Andalucía, Murcia, Alicante y Baleares, todas ellas zonas mediterráneas.
Según TV3, la Generalitat inspeccionará otros espacios públicos de Cataluña para encontrar más ejemplares de la hormiga boyante, y si los encuentra, considera que será prácticamente imposible erradicarla de Cataluña.
Afortunadamente, las condiciones climáticas de Cataluña no son las mejores aliadas de esta y de otras especies invasoras, y la sequía actual hace que les sea más difícil esparcirse.
Como animales tropicales que son, las hormigas bogotanas necesitan un ambiente más húmedo para desarrollarse, pero recientemente no lo están teniendo debido a la sequía y los insectos autóctonos, que sí están adaptados a estos periodos más secos, están ganando la batalla.
