Los Mossos d’Esquadra y la Policía Nacional han desarticulado en Barcelona y Toledo el taller de fabricación de monedas falsas de 2 euros más grande del Estado y el más activo e importante de Europa durante los últimos diez años. La organización criminal investigada, formada por ciudadanos de origen chino, ha llegado a introducir hasta ahora casi 100.000 monedas falsas en el mercado español y cerca de 400.000 en el resto de Europa, todas ellas de valor facial de 2 euros de gran calidad.
Las monedas eran ofrecidas en el mercado ilícito por otros miembros de la organización a un precio que rondaba los 80 céntimos de euro en función de la cantidad que se adquiría, y eran introducidas en el circuito económico a través de compras en comercios, máquinas recreativas y casinos.
La investigación ha contado con muchas dificultades y se ha alargado unos años debido al carácter hermético de la organización, prácticamente la nula trazabilidad que caracteriza la moneda metálica falsa y la alta movilidad de los talleres de fabricación.
Desde entonces la operación policial ha permitido detener a 10 personas y se han desmantelado dos talleres de fabricación: uno en Barcelona en el año 2021, y el otro en Vilacañas, un municipio de la demarcación de Toledo, que reunía –por tamaño, localización y condiciones– las características idóneas necesarias para la implementación de un taller metalúrgico de producción de monedas falsas. Este último es el laboratorio más importante y activo desmantelado a escala de Europa durante la última década.
Varias confiscaciones de monedas falsas similares entre 2018 y 2021
Los primeros indicios se detectaron en septiembre de 2018 cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de una organización criminal presuntamente dedicada a la producción y distribución de monedas falsas de 2 euros. En un primer momento, la investigación se centró en la zona del centro peninsular, evidenciando que estarían implicadas un número indeterminado de personas.
Entre los años 2018 y 2021 se llevaron a cabo diferentes actuaciones policiales, y se constató la existencia de características similares y, por tanto, haciendo sospechar a los agentes que se trataba de la propia organización criminal.
Entre septiembre y octubre de 2018 se incautaron casi 25.000 euros en monedas falsas de 2 euros. Meses después (en julio de 2019) los agentes realizaron una inspección en una nave del municipio madrileño de Fuenlabrada que resultó ser un taller de fabricación de monedas falsas. Pese a que se encontraba recientemente desmantelado, localizaron elementos con los que se producen las monedas de 2 euros –anillos y núcleos– directamente relacionados con las intervenidas el año anterior. Durante los primeros meses de 2020, nuevamente se intervinieron casi 34.000 euros en monedas falsas de 2 euros del mismo tipo.
El 25 de mayo de 2021, los Mossos d’Esquadra descubrieron en un local del distrito de Horta-Vallès de Barcelona un laboratorio de falsificación de monedas de 2 euros que contenía numerosos paquetes con anillos y núcleos para fabricar monedas, estampas para la batida de las monedas, maquinaria para montar las monedas, gran cantidad de cospillas y miles de monedas falsificadas de 2 euros.
La investigación permitió identificar a varias personas de origen chino que estaban implicadas en diferentes tareas y con antecedentes en el tráfico de drogas y de personas. A través de los canales de comunicación policiales se pudo determinar que había coincidencias entre la investigación iniciada por la Unidad Central de Falsificación de Moneda de los Mossos d’Esquadra y la investigación que llevaba a cabo la Brigada de Investigación del Banco de España de la Policía Nacional desde finales del año 2018, motivo por el que se estableció a finales de 2021 un Equipo Conjunto de Investigación coordinado por Europol.
Hermetismo, nula trazabilidad de las monedas y alta movilidad de los talleres
La actividad criminal investigada hasta el momento mostraba una serie de características comunes. En primer lugar, la nacionalidad de los autores. Por otro lado, el mismo modus operandi. En este sentido, los investigados acudían a salas de juego y casinos, donde apostaban en máquinas que funcionan con monedas, introduciendo grandes cantidades de moneda falsa de 2 euros. Finalmente, las monedas falsas presentaban las mismas características técnicas y una alta calidad en sus acabados.
La extrema dificultad y larga duración de la investigación ha residido, por un lado, en el carácter hermético de las organizaciones chinas; por otro lado, en la prácticamente nula trazabilidad que caracteriza la moneda metálica falsa y, finalmente, en la alta movilidad de los talleres de fabricación. Los miembros de la organización realizaban la producción en un breve periodo de tiempo. Una vez terminada la tirada de monedas, detenían la actividad, vendían todo lo producido y se trasladaban a otro lugar donde permanecían en estado latente hasta iniciar otra tirada.
La organización dedicada a fabricar las monedas tenía diferentes peldaños y entre ellos existía un hermetismo total. Por un lado, estaban los productores de las monedas que se desplazaban a la Comunidad de Madrid o a Cataluña para falsificar las monedas. La organización alquilaba locales o naves industriales a través de testaferros y transportaban las prensas (maquinaria pesada) de una comunidad a otra con el objetivo de no ser detectados.
Las estampas y material para falsificar las monedas los tenían escondidos en ambas comunidades y una vez llegaban las prensas a la nave alquilada fabricaban durante unos meses una gran cantidad de monedas que no eran distribuidas hasta que habían desmontado el laboratorio.
Dispositivo de Mozos en Toledo con Policía Nacional
El hermetismo entre sus miembros y la gran movilidad de los laboratorios dificultaron enormemente las tareas de investigación de los policías hasta que a principios del mes de marzo de 2024 fueron detenidos tres hombres de origen chino en un control de alcoholemia de la Policía Municipal de Madrid.
Esto motivó una inspección completa del vehículo que les permitió localizar en el maletero una gran cantidad de monedas de 2 euros repartidas en 48 bolsas, conteniendo cada una 300 unidades, unas 14.500 en total, por lo que los tres ocupantes fueron detenidos.
Además, intervinieron un elemento metálico de forma cilíndrica, cuyo estudio y análisis –realizado por el Centro Nacional de Análisis del Banco de España– determinó que sus características se correspondían con las que poseía uno de los elementos empleados por los falsificadores para la acuñación de las monedas ilegales, tratándose concretamente de un “porta-encuños”. Finalmente, los arrestados fueron puestos a disposición judicial, y el juez decretó su ingreso en prisión.
Las gestiones policiales realizadas a partir de ese momento permitieron acreditar que los arrestados frecuentaban una localidad situada en la provincia de Toledo, y se pudo ubicar en este municipio una nave que podría corresponder con el lugar de producción de las monedas incautadas.
Tras analizar los movimientos llevados a cabo por los detenidos en los últimos meses, los agentes concluyeron que habría otras personas relacionadas con la investigación. Y que, además, en el taller desmantelado se habría realizado una tirada indeterminada pero elevada de monedas falsas de 2 euros en unos tres meses. Las monedas habrían sido colocadas en el mercado ilícito en un corto espacio de tiempo.
Finalmente, a mediados de abril, los agentes inspeccionaron la nave. Un equipo de Mossos d’Esquadra se desplazó hasta Toledo para llevar a cabo el operativo policial conjuntamente con Policía Nacional. En el interior de la nave se intervinieron múltiples cuños para acuñar monedas de 2 euros, porta-encuños, 29.000 núcleos para fabricar monedas falsas, dos prensas hidráulicas de grandes dimensiones, tres máquinas de accionamiento manual y electromecánico para acuñar el lado de la moneda falsa, dos básculas de precisión, dos compresores y una bomba de agua.
Asimismo, confiscaron varias monedas ya acuñadas y numerosos materiales mecánicos y eléctricos de sustitución para las diferentes máquinas intervenidas.
El balance del operativo es de 10 personas detenidas desde el inicio de las investigaciones y el desmantelamiento de los dos talleres de fabricación en Barcelona y en Vilacañas (Toledo). La investigación continúa abierta y no se descartan más detenciones.
Laboratorios itinerantes
En el primer laboratorio desarticulado en Barcelona se confiscó parte de la maquinaria para fabricar las monedas, varias estampas y cajas con anillos y núcleos, así como miles de monedas falsificadas de 2 €, y máquinas para montar las monedas y estamparlas. Este laboratorio había cesado la fabricación, ya que parte de sus miembros habían viajado a China en época de la pandemia. Las prensas de gran tamaño habían sido trasladadas tras producir las monedas con la voluntad de ‘enfriar’ unos meses las monedas falsas fabricadas antes de ponerlas en circulación.
Finalmente, el segundo laboratorio desarticulado en Vilacañas (Toledo) contenía toda la maquinaria pesada, estampas, máquinas de ensamblaje, compresores, máquinas de estampación, anillos y núcleos. Los tres miembros de la organización que estaban fabricando y trasladando las monedas a un lugar seguro desde Vilacañas fueron detenidos en Madrid en un control policial.
