La Guardia Civil aún trabaja para identificar al bebé que ha aparecido muerto en una planta de tratamiento de residuos. Según fuentes próximas a la investigación, el pequeño, que era una niña, todavía tenía el cordón umbilical cuando la han encontrado.
Los hechos sucedieron durante la tarde del lunes, 5 de febrero, en la planta de residuos Mirabel de Cáceres. Hacia las 18:30 horas, los trabajadores han descubierto el cadáver del bebé en una cinta transportadora y han paralizado su funcionamiento para llamar a las autoridades.
Hasta el lugar se han trasladado la Guardia Civil, que se ha hecho cargo de la investigación. Tras el levantamiento del cadáver, se ha trasladado el cuerpo del pequeño al Instituto de Medicina Legal de Cáceres para practicarle la autopsia.
Una planta para tratar los residuos de 151.000 habitantes
La planta de residuos donde se ha encontrado el bebé presta sus servicios a una gran área de población del norte de Extremadura. Según explica el diario ‘Hoy’, el ecoparque de Mirabel gestiona concretamente los residuos de 151.528 habitantes de 93 municipios diferentes, un hecho que podría dificultar la investigación para saber cómo ha acabado el bebé en las instalaciones.
Lo más probable, hoy por hoy, es que el cuerpo del pequeño fuera tirado a un contenedor y que un camión de la basura lo haya transportado, sin saberlo, a la planta.
El alcalde de la localidad, Fernando Grande, ha explicado que el cadáver del bebé lo ha encontrado el personal del ecoparque en una cinta de selección de residuos y que el juez que ha asumido el caso ha decretado el secreto de sumario.
