Una mujer ha sido ingresada en estado grave en el hospital tras sufrir un golpe de calor en su casa y de que su temperatura corporal llegara casi a los 41 °C.
Los hechos han ocurrido en medio de una ola de calor que está afectando prácticamente a toda España, y solo la intervención de los vecinos de la mujer evitaron que la situación acabara en tragedia.
Concretamente, los servicios de emergencia de Madrid recibieron un aviso de unos vecinos que alertaban de que hacía muchas horas que no veían ni sentían ruidos en la casa de una mujer de 88 años.
Ante esta situación, los sanitarios se trasladaron a la vivienda acompañados de los Bomberos, que ayudaron a abrir la puerta.
Una vez dentro, se encontraron a la mujer inconsciente y con un alto grado de deshidratación.
Cuando le tomaron la temperatura corporal, el termómetro marcaba 40,9 grados.
Inmediatamente, los sanitarios aplicaron “medidas físicas de frío” sobre la mujer para estabilizarla y poder trasladarla al hospital, donde quedó ingresada en estado grave, pero estable.
Las autoridades han recordado que en episodios de calor tan fuertes como los que estamos viviendo, es muy importante cuidar a los grupos de personas más vulnerables, que acostumbran a ser los enfermos, los niños y las personas mayores.
En esta ocasión, los vecinos de la mujer, que alertaron cuando se dieron cuenta de que no tenían noticias de ella, le salvaron la vida.