Cada vez queda menos para el Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad 2024, uno de los eventos más esperados del año en España. En solo unas semanas, millones de españoles estarán pendientes de los números que cantarán los niños de San Ildefonso, con la esperanza de que la suerte les suene y puedan cambiar su vida con el “Gordo”, el premio más deseado de todos.
Al acecho de este gran sorteo, no sólo aumenta la expectación, sino que también proliferan las predicciones y teorías sobre cuál será el número ganador. Uno de los vaticinios más comentados de este año es el del popular vidente Mestre Joao, quien en el programa “Anda Ya” de los 40 Principales ha revelado que la terminación del “Gordo” será terminado en 40. Pero, aún más agobiante, ha asegurado que el número completo del “Gordo” será el 35040, un pronóstico que ha levantado mucha expectación y también cierto escepticismo entre los aficionados a la Lotería.
¿Magia o Azar?
¿Tiene alguna base científica o estadística esta predicción? La respuesta es sencilla: no. La Lotería de Navidad es, por definición, un juego de azar, y aunque los expertos pueden analizar las probabilidades de ciertos números, cada bola extraída del bombo es completamente aleatoria. La teoría de que un número u otro puede tener más posibilidades de ser el ganador no tiene fundamento científico. Sin embargo, la creencia en la suerte, en los números cabalísticos y en las predicciones forma parte de la tradición que rodea este sorteo, y para muchos, el hecho de “soñar” con el número ganador es tan importante como el premio en sí mismo.
El Maestro Joao, conocido por sus apariciones en programas de televisión y sus predicciones, ha convertido el Sorteo de Navidad en un tema recurrente de su carrera. Este 2024, su número escogido, el 35040, todavía está disponible para comprar en la administración número 4 de Talavera de la Reina, en Toledo, lo que ha hecho que los más creyentes en sus predicciones se afanen en adquirirlo, mientras que los más racionales prefieren confiar en las estadísticas y en el simple azar.
