Un hombre de 36 años ha sido condenado a 24 años de prisión —se enfrentaba a una pena de 47 años— tras admitir haber abusado sexualmente de una niña de 14 años, obligándola a hacerle una felación, y de ofrecer drogas y regalos a otros menores para mantener relaciones con ellas.
El acusado ha aceptado todos los cargos que proponía la Fiscalía —prostitución, corrupción de menores, ciberacoso, agresión sexual, amenazas, contra la salud pública y posesión de pornografía infantil. Se ha “justificado” asegurando que tiene una enfermedad mental que le impide “controlar los impulsos sexuales” y que sufre “depresión”, según recoge el digital ‘Última Hora’.
Aunque la Fiscalía pedía inicialmente una pena de 47 años de prisión, las dos partes han llegado a un acuerdo y cumplirá 24 años de condena por seis episodios diferentes de abusos sexuales a menores.
Obligó a una niña de 14 años a hacerle una felación
El más grave lo cometió sobre una niña de 14 años, a quien obligó a hacerle una felación en su casa en septiembre de 2020. Según el escrito de la acusación, la menor había ido a casa del hombre a buscar 5 euros en marihuana que le había comprado.
Cuando la chica quiso marcharse, sin embargo, el hombre le bloqueó la salida y le ordenó que lo “complaciera” bajo amenazas de matarla a ella y a toda su familia. La víctima, por miedo, le hizo una felación. No contento con ello, el acusado le pidió que se despojara para mantener relaciones sexuales, pero la chica le imploró que la dejara marchar y que a cambio no lo denunciaría.
El hombre la dejó marchar, pero días después, cuando vio que la había bloqueado en las redes sociales, se puso en contacto con una amiga de la víctima y volvió a amenazarla para que no denunciara, diciendo que “una bala vale un euro”.
Aparte de este caso, el acusado ha sido condenado por cinco episodios más de naturaleza similar. Por ejemplo, en diciembre de 2019, el hombre habría ofrecido a una niña de 12 años dinero a cambio de mantener relaciones sexuales. Llegó a quedar con la niña a través de las redes, pero el hermano de la niña vio los mensajes en su móvil, puso una denuncia y en el lugar de la cita se presentó la Policía.
En 2020, en agosto, el acusado se hizo pasar por un chico de 17 años para contactar con una menor de 14 años, a quien intentó convencer de quedar en persona a cambio de dinero y regalos. En este caso, fue la pareja del acusado quien frustró el encuentro, denificándolo ante la Policía y alertando a la niña de 14 años de que su cita era en realidad un hombre adulto.