El Servicio Catalán de Tráfico (SCT) ha informado de que un total de 22 personas han muerto en las carreteras catalanas en los primeros dos meses del año, tres más que en 2024 (un +16%). Se trata de 20 hombres y 2 mujeres.
El 50% de las víctimas (11) han sido de colectivos vulnerables: ocho motoristas, dos peatones y un ciclista. Las vías con más víctimas mortales han sido la C-14 (2), la AP-7 (2) y la A-2 (2). La mayoría de accidentes mortales se han concentrado en las demarcaciones de Barcelona (10) y Tarragona (9), en Lleida se han producido tres y ninguno en la demarcación de Girona. En paralelo, a lo largo de estos dos meses —enero y febrero— se han registrado hasta 105 heridos de gravedad en accidentes de tráfico, 12 más que en el mismo periodo del año pasado.
Tráfico recuerda que en este inicio de 2025 persiste la tendencia de una mortalidad de motoristas “proporcionalmente” elevada respecto al total de conductores fallecidos, un 36% del total. El resto de finados viajaban en turismo (7), furgoneta (2) y camión (2). La SCT hace un llamamiento a motoristas, ciclistas y peatones a tener más percepción del riesgo y conciencia de su fragilidad. Y al resto de usuarios, Tráfico reclama respeto y prudencia para reducir las víctimas de estos colectivos.
12 de las víctimas tenían menos de 35 años
En cuanto a los 22 siniestros mortales, seis han sido accidentes simples, cinco choques frontales, cuatro encalados, cuatro colisiones laterales y dos atropellos. En cuanto a la edad de los fallecidos, las franjas de 25 a 34 años (7) y de 15 a 24 años (5), aglutinan a la mitad de las víctimas mortales. La franja de 55 a 64 años también suma cinco víctimas mortales. Finalmente, si se analizan las muertes por tipo de día de la semana, 14 han tenido lugar en día laborable y 8 en fin de semana, festivo o víspera de festivo.
Barcelona y Tarragona acumulan casi el 90% de los fallecidos
En este primer tramo de 2025, las demarcaciones de Barcelona y Tarragona han sumado 19 de las 22 víctimas mortales (86%). En el caso de Barcelona, 10 personas han perdido la vida en las carreteras, dos más que en 2024. En esta demarcación han fallecido cinco de los ocho motoristas. A continuación, Tarragona registra un aumento considerable de la siniestralidad, con nueve fallecidos este año, cinco más que el año pasado. Las dos víctimas mortales de vehículos pesados han tenido lugar en esta demarcación.
En cuanto a las carreteras leridanas, se han registrado tres accidentes mortales, el mismo número que en 2024, dos de ellos en la comarca del Segrià. Finalmente, Girona se mantiene como la única demarcación que no ha registrado víctimas mortales en estos primeros dos meses. En el mismo periodo del año pasado, murieron tres personas en las carreteras gerundenses.