El Consejo Ejecutivo de la Generalitat de Cataluña prevé aprobar hoy martes el inicio del proceso de traspaso de la línea R1 de Cercanías de Renfe a la Generalitat. Esta línea, que conecta la estación de La Sagrera, en Barcelona, con Maçanet-Massanes, será la primera de la red ferroviaria en pasar a manos de la Generalitat.
La línea R1 es la única que transcurre íntegramente por Cataluña, lo que facilita el traspaso dentro del marco de la transferencia de la gestión de las Cercanías, un proceso que ya estaba incluido en los acuerdos entre el gobierno catalán y el Estado. Este primer paso implica el traspaso del tramo entre La Sagrera y Maçanet, pero aún queda pendiente que el gobierno español excluiga formalmente el R1 de la red ferroviaria y que se firme un convenio entre las dos administraciones.
El pistoletazo de salida del traspaso de Cercanías forma parte del acuerdo que firmó el gobierno catalán con Aragonès al frente para apoyar la investidura de Pedro Sánchez como presidente del gobierno Español. Además del traspaso de la línea R1, en los próximos meses se espera también la transferencia de las líneas R2 y R3, con el objetivo de que la gestión de toda la red ferroviaria pase a la Generalitat a finales de año.
El movimiento del Gobierno se produce en un momento de dificultad para Salvador Illa en cuanto a la negociación de los presupuestos, después de que ERC haya endurecido el discurso y haya cerrado la puerta a apoyar ningún borrador de cuentas públicas si no se cumplen los acuerdos que permitieron investir al socialista como presidente de la Generalitat.
