La Guardia Civil ha desmantelado un taller mecánico ilegal en Sant Feliu de Guíxols (Baix Empordà). La policía tuvo conocimiento de la situación y, tras realizar indagaciones, el martes localizaron el taller cerrando en cuyo interior se hacían tareas de reparación.
En total, encontraron hasta siete coches pendientes de reparar. El responsable les explicó que los tenía que arreglar y luego venderlos. Los agentes le pidieron la documentación, pero no les aportó ningún papel que acreditara que podía hacer estos trabajos.
Además, observaron que había piezas, parachoques, ruedas y llantas al aire libre. También vieron residuos peligrosos como aceite de motor sin ninguna protección, que se podía filtrar al sudor.
Por otro lado, localizaron residuos como calentadores eléctricos, neveras, lavadoras, también almacenados al aire libre y sin ningún tipo de medida medioambiental.
