El Departamento de Espacio Público y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Cambrils inició el pasado viernes los trabajos de limpieza del tramo final de la Riera de Camós, desde el antiguo trazado de la vía ferroviaria hasta los últimos 80 metros de la desembocadura. Esta actuación, que consistirá principalmente en la retirada de cañas y cinco unidades de parquinsonias, incluye una prueba piloto de instalación de una lona biodegradable en una superficie de 3.950 metros cuadrados para evitar el crecimiento de la caña. La limpieza se ha adjudicado a la empresa Atfortis por un precio de 44.715,05 euros (IVA incluido) y se financiará con una subvención de la Agencia Catalana del Agua (ACA).
Paralelamente, el Ayuntamiento está trabajando en una nueva licitación para la limpieza regular de los barrancos, rieras y cavas que atraviesan el núcleo urbano de Cambrils, que en este caso se financiará con fondos propios del Ayuntamiento de Cambrils.
La concejala de Sostenibilidad, Hélène Arcelin, que hoy se reunirá con vecinos del Molino de la Torre y el Regueral para explicar las actuaciones, ha recordado que el consistorio limpia regularmente los arroyos para aumentar la capacidad de desagüe y reducir el riesgo de inundaciones (la última actuación se realizó en diciembre del año pasado), pero ha afirmado que las subvenciones de la ACA no son suficientes para llegar a todo porque la caña (Arundo donax) es una especie invasora muy difícil de extinguir, que se esparce y rebrota con mucha facilidad y desplaza a las especies autóctonas.
La regidora también ha explicado que a esta problemática se añade que el tramo de los últimos 80 metros es un espacio que no se puede limpiar ni mantener porque se considera una zona húmeda de especial protección para la Generalitat de Cataluña. Por ello, el Ayuntamiento ha hecho una carta a la ACA para insistir en la necesidad de actuar también en este espacio, teniendo en cuenta los antecedentes, ya que esta zona que rodea la riera de Montclar fue una de las más afectadas por el temporal de levante del 22 de octubre de 2019, que provocó graves inundaciones en la urbanización Sol Cambrils Park, y que causó daños en diferentes puntos del municipio evaluados en dos millones de euros.
La proliferación de la caña y las problemáticas de las rieras mediterráneas
Ante la proliferación de la caña, la instalación de la lona biodegradable, que es una recomendación de la ACA, podría ser una solución más efectiva para impedir que vuelva a crecer la caña después de la limpieza. Hay que tener en cuenta que el coste de controlar las cañas es muy alto y solo se pueden extinguir con la extracción total del rizoma de una superficie muy grande, lo que implicaría una inversión económica que no cubren las ayudas y que no está al alcance de la mayoría de Ayuntamientos.
Las ramblas de carácter mediterráneo sólo bajan en episodios de lluvias de fuerte intensidad y por ello presentan problemáticas como los vertidos incontrolados, una percepción muy baja del riesgo, los usos que se permiten, o la canalización que conlleva que el agua baje con más fuerza.
Además, la limpieza completa de todo tipo de vegetación también es un problema de cara a frenar la fuerza del agua. La vegetación de ribera, autóctona, ayuda a captar agua en periodos iniciales y también a frenar su fuerza cuando el caudal es más alto, mientras que las cañas tienen unas raíces poco profundas, fáciles de arrancar con una bajada de agua con fuerza, y pueden ocasionar problemas importantes. Por ello, hay que cambiar el paradigma y eliminar las cañas y los residuos, pero mantener la vegetación autóctona para evitar que el caudal coja más fuerza destructiva.
