Ayer jueves por la noche apareció el cadáver de un hombre de 43 años en una pensión de la calle Perdón, en Salamanca.
Los bomberos del Ayuntamiento de Salamanca recibieron un aviso ayer poco antes de las once de la noche, en el que la propietaria de una pensión, en la calle Perdón, solicitaba su ayuda, ya que hacía unos cuantos días que no veía a uno de los huéspedes del establecimiento.
No respondía a las llamadas a la puerta y de la habitación salía un fuerte mal olor. Cuando llegaron los bomberos y accedieron a la habitación toparon con el cadáver de este hombre de 43 años.
De momento, y a la espera de la autopsia, no se saben las causas de la muerte del huésped.
Lo que si se pudo determinar, por el avanzado estado de descomposición del cuerpo, es que hacía varios días que había muerto.