Las votaciones de la segunda vuelta del congreso de ERC ya han comenzado. La militancia republicana decide desde las 9 horas de este sábado entre mantener a Oriol Junqueras (Militancia Decidim) al frente del partido, o pasar el relevo del liderazgo a Xavier Godàs (Nueva Izquierda Nacional).
La votación electrónica se prolongará hasta las 20 horas, cuando Esquerra dará a conocer los resultados de la elección a la nueva ejecutiva. Antes, a las 10, 13, 16 y 19 horas, se irá informando de los datos de participación, que en la primera vuelta (30 de noviembre) superó el 80%, una cifra récord. Las últimas semanas —y meses— han estado marcadas por la picardía interna, que ha subido de tono entre los propios Junqueras y Godàs en los últimos días.
Quién liderará el partido
ERC resuelve hoy quién preside el partido. Habrá sido necesaria una segunda vuelta, después de que ninguna de las tres candidaturas superara el 50% de los votos el 30 de noviembre. Estuvo a punto de hacerlo Militancia Decidim, con Junqueras y Ciurana Alamany al frente, que alcanzó el 48,3% de los apoyos. Así, el cruce definitivo sitúa las bases de ERC ante el dilema final para escoger la nueva ejecutiva: o mantiene el liderazgo de Junqueras (ha presidido el partido durante 13 años) o apuesta por un cambio de rumbo de la mano de Nueva Izquierda Nacional.
La candidatura de Godàs y Alba Camps quedó segunda, con un 35,3% de los votos. El congreso ha estado marcado por la picardía interna y un reguero de reproches y acusaciones desde hace meses. De esta manera, o Junqueras o Godàs presidirán ERC a partir de mañana. El candidato de Militancia Decidim aspira a mantener el cargo —que ya ha ostentado 13 años— y alargar su mandato.
Inhabilitado todavía por el Supremo por el 1-O, y tras estar 4 años encarcelado, Junqueras asegura que su equipo es “municipalista y de auténtica renovación“. Quiere que ERC sea “grande” y la referencia socialdemócrata del país, seduciendo a votantes no independentistas.
Junqueras todavía no ha concretado qué votó en la consulta interna de ERC sobre la investidura de Salvador Illa. Afirma que es partidario de revisar los pactos con el PSC y que no habrá nuevos acuerdos si los socialistas no cumplen los pactos ya asumidos.
Alamany, su candidata a la secretaría general, es la principal defensora e impulsora de que ERC entre en el gobierno de Jaume Collboni en el Ayuntamiento de Barcelona. Alamany ha afirmado esta semana que la segunda vuelta es un mero “trámite” para su candidatura.
Por su parte, Nueva Izquierda Nacional se define como los del ‘sí’ y los del ‘no’ a la consulta sobre Illa. La candidatura de Godàs y Camps apuesta por fortalecer la izquierda nacional, propone una Conferencia Soberanista y una Estrategia para el Referéndum, además de fortalecer y democratizar la organización para hacerla más “coral y compartida”. También quiere convocar el próximo congreso de ERC en el verano de 2027 para someterse a la confianza de la militancia.
Godàs destacó tras la primera votación que quedaba demostrado que la mitad de la militancia “quiere un cambio”. Y constató que el apoyo de las bases de ERC a Junqueras ha pasado del mes del 80% —en el congreso de 2023— a un 48,3% el 30 de noviembre de este año: “Ha disminuido muy notablemente”.
El papel de Fuego Nuevo
Foc Nou, la candidatura de Helena Solà y Alfred Bosch, quedó tercera —y última— en la votación del 30 de noviembre, con un 12,6% de los apoyos. La lista que quería reunir el ‘no’ de la militancia en Illa y situar la independencia en el centro del mostrador de Calabria decidió el miércoles en una asamblea de sus avaladores que no pediría el voto por ninguna de las dos candidaturas finalistas. Según Fuego Nuevo, ni Militancia Decidim ni Nueva Izquierda “no cumplen ni garantizan” las cinco condiciones que presentaron.
Sin embargo, la candidatura sí pidió a sus miembros y votantes que decidan su apoyo del sábado “con conciencia”. A través de un comunicado, Fuego Nuevo ha detallado el grado de cumplimiento de estas condiciones por parte de las otras dos candidaturas a partir de tres categorías: de mayor o menor grado: verde, naranja y rojo.
Militancia Decidim sólo tiene una categoría verde (crear una auditoría externa sobre la estructura B del partido). Nueva Izquierda tiene 4 en verde: incorporar el Plan Fuego Nuevo independencia 2030, una consulta vinculante sobre el acuerdo con el PSC antes de agosto; y modificar los estatutos para evitar acumulación de cargos, aparte de la auditoría.
La lista de Junqueras tiene 3 categorías en rojo: referéndum acordado y vinculante como condición para nuevas investiduras en Madrid; la consulta sobre los pactos con el PSC; y la modificación de los estatutos. El equipo de Godàs no tiene ninguna categoría en rojo, sólo una en naranja: el referéndum como condición para nuevas investiduras. La petición de incorporar el Plan Fuego Nuevo 2030 es de color naranja para los de Junqueras.
La gestión de Junqueras con el caso de acoso en Exteriores
Junqueras ordenó a Bosch que no activara los protocolos de la Generalitat ni de ERC sobre el caso de presunto acoso sexual en Exteriores en 2019 que implicaban al jefe de gabinete del departamento. Así consta en las alegaciones de Bosch en el expediente de ERC, a las que ha tenido acceso la ACN, y así lo confirman varias fuentes consultadas —todas conocedoras del caso.
El entonces presidente de ERC no quería que Función Pública (en manos de Junts) accediera a la investigación, y motivó una investigación “discreta, informal e irregular” al Gobierno, paralela a los canales oficiales, encabezada por su jefe de gabinete, Lluís Juncà (en Vicepresidencia). Bosch quería activar los protocolos, pero obedeció lo que el líder de ERC le mandó en reuniones en Lledoners los días 4 y 24 de diciembre de 2019.
Esta información, destapada el martes por la ACN, ha provocado más reproches entre las candidaturas en las últimas horas. Junqueras, que no ha negado los hechos, asegura que se trata de “filtraciones interesadas” por parte de la candidatura rival. Bosch ha confirmado la información publicada en declaraciones a TV3 y a través de las redes.
Participación histórica
El censo de la militancia de ERC que puede votar este sábado es de unas 8.170 personas. En la primera vuelta la participación fue histórica: más del 80% de las bases republicanas participaron de la votación telemática. Este volverá a ser un hecho clave de cara a la segunda vuelta, que se ha convertido en un plebiscito sobre la figura de Junqueras.
Como en la primera vuelta, la votación se abrirá a las 9 horas y se prolongará hasta las 20 horas, cuando ya se sabrá quién presidirá ERC. El partido prevé comunicar los resultados a esta hora y, después, cada candidatura de la segunda vuelta del 30º Congreso Nacional podrá ofrecer ruedas de prensa, por separado. Las bases republicanas escogerán la Ejecutiva Nacional después de haber elegido ya a los próximos consejeros y consejeras nacionales.