La Sociedad Española de Neurología (SEN) ha celebrado la decisión de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) de comercializar el Lecanemab, un medicamento para un tipo de afectados de Alzheimer que ralentiza la enfermedad. En un comunicado, ha agradecido que la EMA haya “reconsiderado” su recomendación inicial contraria a la comercialización y ha puesto en valor que esto permitirá que los pacientes europeos tengan acceso a los mismos tratamientos que pacientes de zonas como Estados Unidos, Reino Unido, Japón o China. Por su parte, la Unidad de Memoria del Servicio de Neurología del Hospital de Sant Pau ha expresado también su “gran satisfacción” ante la recomendación, que ha considerado que es un “hito histórico” en la lucha contra la enfermedad.
La SEN ya mostró en julio pasado su preocupación al conocer que inicialmente el comité asesor de la EMA recomendó que no se aprobara el fármaco en la Unión Europea (UE), ya que consideraba que esto situaba a los centros europeos “a la cola en innovación en este campo”. Por esta razón, la SEN y otras sociedades científicas europeas pidieron reconsiderar la decisión argumentando que se podía aumentar la seguridad de los fármacos excluyendo a los pacientes con más riesgo de complicaciones e incluyendo restricciones, como finalmente se anunció este jueves.
La coordinadora del Grupo de Estudio de Conducta y Demencias de la SEN, la doctora Raquel Sánchez del Valle, ha apuntado que serán ahora las autoridades españolas las que tendrán que decidir si el fármaco será financiado por el Sistema Nacional de Salud y en qué condiciones. El grupo que encabeza Sánchez del Valle tiene previsto hacer unas recomendaciones sobre los criterios a tener en cuenta para el buen uso del mismo y otros fármacos similares.
Por su parte, desde el Hospital de Sant Pau, que participó en el estudio de fase 3 del medicamento, han apuntado que su introducción en la práctica clínica abre un nuevo paradigma en el tratamiento del Alzheimer. El jefe del grupo de investigación en Neurobiología de las Demencias en el centro y director de la Unidad de Memoria, Juan Fortea, ha aseverado que la recomendación de la EMA marca el inicio de un nuevo modelo de atención a las personas con Alzheimer. Esta etapa requerirá la implementación de marcadores biológicos, la capacitación de profesionales especializados y un aumento en la asignación de recursos para garantizar una atención integral e innovadora “que permita cambiar el curso clínico de la enfermedad por primera vez”.
En una línea similar, Ace Alzheimer Center Barcelona ha valorado positivamente la decisión de la EMA, ya que este medicamento supone un “avance crucial” en el tratamiento de la patología y ha considerado que marca “un antes y un después”. En concreto, ha afirmado que se abre una ventana de esperanza para pacientes y familias y subraya el valor de la ciencia y la innovación en la búsqueda de soluciones.
Sin embargo, ha alertado de que su recomendación no implica que su prescripción sea viable en España inmediatamente. En este sentido, ha apuntado que es necesario que las autoridades sanitarias españolas trabajen en la adaptación del fármaco dentro del sistema de salud, garantizando que los pacientes que cumplan los criterios de prescripción puedan acceder al tratamiento tan pronto como sea posible y de la forma más segura.