Un vuelo de una aerolínea portuguesa que viajaba de Lisboa a las Islas Azores se convirtió en una escena digna de una película cuando más de 130 hámsters se escaparon de sus jaulas a la bodega de carga. El envío, destinado a una tienda de animales, también incluía hurones y algunos pájaros, pero fueron los pequeños roedores los que convirtieron este vuelo rutinario en un episodio absolutamente inesperado.
El avión salió de Lisboa con destino a las Azores, pero durante el vuelo los hámsters comenzaron a escaparse de sus jaulas. El caos se formó cuando los roedores mordieron cables eléctricos fundamentales para el funcionamiento de la aeronave, dejando el aparato fuera de servicio. Ante la gravedad de la situación, el piloto tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia.
Una vez en tierra, los pasajeros fueron evacuados y se les pidió que entregaran todas sus pertenencias para ser inspeccionadas en busca de los animales fugitivos. Las jaulas que contenían los hámsters estaban en mal estado, lo que facilitó su huida.
Cuando el avión aterrizó, el personal del aeropuerto descubrió que un total de 132 hámsters se habían escapado y deambulaban libremente por la bodega de carga. A partir de ahí, se puso en marcha una operación para capturar a los animales, que continuó durante toda la noche del sábado.
#Update footage showing one of the Hamsters on the cargo hold pic.twitter.com/EIzvz5d0pJ
– Air Safety #OTD by Francisco Cunha (@OnDisasters) November 17, 2024
