Mollerussa ha vivido un atardecer mágico y multitudinario con la llegada de Sus Majestades los Reyes de Oriente, que este año han vuelto a optar por el autobús como medio de transporte. En la tradicional cabalgata, han repartido 700 kilos de caramelos blandos entre los asistentes y han llenado las calles de música y ritmo gracias al acompañamiento con la batucada de los Tabalats y la actuación de los Diablos de Mollerussa, que han recibido los Reyes de Oriente con un espectacular castillo de fuegos.
La comitiva, formada por tres carrozas reales, un carro lleno de carbón y una última llena de regalos, ha recorrido la avenida Generalitat y la calle de Ferrer i Busquets hasta llegar a la Plaza del Ayuntamiento. Allí, Sus Majestades han hecho la adoración al Niño Jesús en las escaleras de la iglesia de Santiago.
Posteriormente, han saludado a los mollerussenses y ciellones desde el balcón del Ayuntamiento, donde el alcalde de la ciudad, Marc Solsona, les ha entregado las llaves que abren todos los hogares de Mollerussa. Como recuerdo de su visita, han dejado su firma en el libro de honor de la ciudad y se han puesto manos al trabajo para hacer el reparto de regalos por todas las casas.