Desgraciadamente, no es la primera vez que este tipo de noticias aparecen en los medios de comunicación. El Ayuntamiento de Estaràs, en L’Urgell, alertó la semana pasada de que los dueños de animales de compañía cuidaran a sus perros y gatos tras detectar veneno en las calles de este municipio de Lleida. Mediante un bando, el Ayuntamiento alertaba a los propietarios de que “extremen las preocupaciones y eviten que sus animales coman cosas de la calle” y añadía que “nos han informado de que se han relacionado casos de posibles envenenamientos”.
La alerta por parte del Ayuntamiento de Ibiza llegaba después de que un vecino de este municipio denunciara que su perro había muerto envenenado en noviembre pasado. El vecino explicaba al diario Segre que vio como su perro comía jamón dulce del suelo y que parecía esconder algo. El perro acabó muriendo 45 días después a pesar de pasar varios tratamientos. La semana anterior hubo otro caso de envenenamiento de perro, y también alertan de gatos envenenados en la calle.
Ante estos hechos, los Agentes Rurales han iniciado una investigación tras tener conocimiento de la muerte de mascotas en Anglesola. Este no ha sido el único caso en Lleida, ya que vecinos de Térmens denunciaron la semana pasada que una perra y tres gatos que cuidaban murieron envenenados. Esta situación genera una gran alerta y preocupación entre los vecinos y vecinas de estos municipios, especialmente los que tienen animales de compañía.
La sospecha generalizada en estos municipios es que alguien se dedica a colocar veneno a propósito para matarlos. Los vecinos piden un mayor control y que se tomen medidas al respecto.
Lleida, en alerta por la muerte por veneno de ejemplares de aves protegidas
Aunque en Lleida ciudad también se han visto y sentido casos de envenenamiento a animales de compañía, la preocupación de los Agentes Rurales es otra y el cuerpo ha intensificado la lucha contra el uso de venenos en el medio natural por la muerte de ejemplares de aves protegidas. En junio del año pasado los Agentes Rurales investigaron la muerte por envenenamiento de 17 ejemplares de aves protegidas, donde una de las especies más afectadas es el milano real, en peligro de extinción del que se han detectado 10 ejemplares muertos por venenos en los últimos tres años.
La utilización de venenos se considera una de las principales causas de pérdida de biodiversidad para diferentes especies, y muy especialmente para las aves rapaces, como en el caso del milano real. El veneno puede entrar en la cadena alimentaria por lo que representa un peligro para las personas, así como para otros animales salvajes y también para animales de compañía. Por este motivo, se hace un llamamiento a utilizar métodos legales para luchar contra las plagas de especies como son los roedores o los conejos y que no producen muertes indirectas o secundarias en el medio.