La demarcación de Girona ha vivido en los últimos meses varios episodios graves de violencia que incluso ha acabado afectando a los Mossos d’Esquadra, encargados de controlar la situación y evitar que se produzcan consecuencias más graves.
Ante esta escalada de violencia, los Mossos han admitido que les “preocupa” esta “violencia gratuita” contra la policía cuando hay otros incidentes, y han hecho referencia a los episodios vividos en el barrio de Font de la Pólvora de Girona o en Salt, también en El Gironès.
La comisaria y jefa de la Región Policial de Girona, Sílvia Catà, señala que están analizando los motivos y concreta que habitualmente son jóvenes “sin motivo” los que se enfrentan contra los agentes. “Lo estamos trabajando en el ámbito interno, pero a la policía ni se la agrede ni se la lesiona”, ha remarcado Catà, que ha explicado que lo notan desde la pandemia.
La comisaria también ha revelado que la lucha contra el cultivo de marihuana y las agresiones sexuales son delitos contra en los que “se asoman muchos recursos policiales”. Catà también ha reconocido tener una “policía envejecida”.