El Ayuntamiento de Lloret de Mar (Selva) prevé incluir una partida en los presupuestos de 2025 que permita contratar inspectores que controlen apartamentos turísticos ilegales.
El concejal de Promoción de Lloret de Mar, Frederic Guich, ha recordado que esta es una competencia que corresponde a la Generalitat, pero la asumirá el consistorio por la inacción. “Como ellos no ponen inspectores, los tendremos que poner nosotros”, asegura el concejal a la ACN.
Guich ha afirmado que en Lloret de Mar hay unas 700 viviendas que tienen licencia de uso turístico, pero que no la usan. Por el contrario, calculan que hay un millar de apartamentos que no tienen licencia, pero operan de forma ilegal.
El concejal de Promoción de Lloret de Mar ha explicado que el trabajo de los nuevos inspectores consistirá en “hacer seguimiento de los anuncios de apartamentos” que se publican en Lloret de Mar. A partir de ahí comprobarán que cada apartamento tenga en vigor la licencia de Vivienda de Uso Turístico correspondiente. En caso de que no tenga ninguno, comunicarán a la Generalitat que se trata de un apartamento ilegal para que les aplique la sanción correspondiente.
Guich ha recordado que la inspección correspondería hacerlo al Gobierno, pero tras años de inacción por su parte han decidido ser proactivos en la persecución de aquellos apartamentos que actúan sin una licencia vigente. “Como la Generalitat no envía inspectores, lo tendremos que hacer nosotros”, insiste en declaraciones a la ACN el concejal.
Pese a todo, el consistorio ha avanzado que no cree atrapar todos los apartamentos ilegales con el equipo de inspectores que creará en 2025. Por eso pide la complicidad del Gobierno en la lucha contra los negocios que operan sin licencia. El principal motivo es que el consistorio apunta que podría haber un millar de apartamentos que se alquilan sin ser declarados oficialmente como Viviendas de Uso Turístico (HUT).
“Distorsión y mala imagen”
Frederic Guich critica que este tipo de establecimientos representan un importante agravio en la economía turística de la ciudad. En primer lugar, recuerda que no pagan las tasas que corresponden, como la de basura donde los apartamentos turísticos pagan más que los domicilios de primera residencia. Por el contrario se benefician de tributos que cobran los negocios regulados, como las inversiones que se hacen con la tasa turística y muchas otras mejoras.
Aparte de todo ello, Guich cree que la falta de regulaciones les permite ofrecer precios mucho más bajos que “distorsionan” entre la oferta de otros establecimientos regulados. Esto hace que sean un elemento de atracción para “un público no deseado” de Lloret de Mar y cree que “daña la imagen” de aquellos empresarios que han invertido en sus negocios enfocados a un turismo de calidad.