El Ayuntamiento de Girona ha aprobado definitivamente la normativa que regulará la Zona de Bajas Emisiones de la ciudad. Lo ha hecho con los votos del gobierno local (Guanyem Girona, Junts y ERC), la abstención del PSC (8 votos) y los votos en contra del PP y VOX (2 concejales). Desde la oposición han cuestionado los horarios que abarcará la normativa (de siete de la mañana a ocho de la tarde en días laborables) y que no se extienda a otros municipios del área metropolitana. El PP también reprocha que no haya una red de aparcamientos disuasorios que le acompañe y VOX considera que no hay datos que vinculen las emisiones de los coches con el cambio climático.
Girona ya tiene normativa que restringe la Zona de Bajas Emisiones. Hace unas semanas, el consistorio ya había dado luz verde a la normativa de forma provisional y este lunes se ha sacado adelante de forma definitiva tras resolver las alegaciones.
La teniente de alcaldía de Transformación Urbana y Transición Ecológica, Cristina Andreu, ha detallado que se han aceptado algunos puntos sobre excepciones de determinados automóviles y también se ha levantado la restricción para vehículos comerciales, en consonancia con la normativa autonómica.
Andreu ha recordado que las limitaciones de circulación se harán de lunes a viernes entre las siete de la mañana y las ocho de la tarde para determinados vehículos que no tengan etiqueta ambiental. Quedarán exentos de esta restricción todos aquellos vehículos que paguen el impuesto de circulación en la ciudad, que podrán circular libremente a pesar de no cumplir con las condiciones estipuladas.
También se hará una excepción con todos los autobuses, ya que Andreu ha apuntado que transportan a muchas personas y eso reduce la movilidad privada y, por tanto, de emisiones contaminantes. Por último todos los vehículos podrán pasar un máximo de 24 veces al año antes de ser multadas.
La normativa ha contado sólo con el apoyo de las tres formaciones del gobierno local. El principal grupo en la oposición, el PSC, se ha abstenido. El concejal Josep Palouzié ha asegurado que su formación cree en la ZBE pero considera que hay aspectos que no se alinean con su punto de vista.
En este sentido, piden extender la zona a “municipios vecinos” aparte de redefinir los horarios de aplicación para evitar que algunas de las personas que trabajan en la ciudad se vean afectadas por la normativa.
Por su parte, el portavoz del PP, Jaume Veray, cree que habría que “haber acotado más” el ámbito incluido en la ZBE y han echado en falta que la normativa lleve de la mano “un plan de aparcamientos disuasorios”. El portavoz de VOX, Francisco Javier Domínguez, ha criticado toda la normativa porque creen que no hay ningún argumento que justifique que las emisiones de los vehículos privados como causantes del cambio climático.
Aprobación del plan de vivienda
El plenario de este lunes ha aprobado de forma inicial el Plan Local de la Vivienda en la ciudad. Lo ha hecho con el apoyo de los tres grupos al gobierno local y la abstención de las tres formaciones en la oposición.
Desde el PP han anunciado que este documente llevará “burocratización” en la gestión de la vivienda y que hay falta de profesionales destinados a este ámbito. Además, considera que hay “mucha diferencia entre las sanciones y los incentivos” que se ofrecen a la hora de facilitar vivienda.
El PSC es quien más contrario se ha mostrado con el documento. El concejal Maxi Fuentes ha criticado que no saben ni los solos que quieren destinar a construir vivienda pública y que hay algunos aspectos vinculados al gasto presupuestario que no están suficientemente detallados en este documento sobre la proyección de acceso a la vivienda en la ciudad en los próximos años.