Los Mossos d’Esquadra han detenido a dos ladrones que se dedicaban a cometer atracos en un camino de arena próximo a la estación de trenes de Blanes (Selva). Los dos delincuentes, que tienen 40 y 41 años y acumulan múltiples antecedentes, solían amenazar a las víctimas con un cuchillo o una navaja y les tomaban los teléfonos móviles, la cartera u objetos de valor. Los mossos los acusan de cinco robos con violencia e intimidación cometidos en tan solo doce días de diferencia, entre el 7 y el 19 de noviembre. En uno de los casos, los ladrones abordaron a una estudiante menor de edad y le sustrajeron la mochila. La policía localizó a uno de los delincuentes en Francia el pasado martes y al día siguiente los mossos arrestaron al segundo ladrón en Blanes mismo.
Según informan los Mossos d’Esquadra, los dos ladrones siempre actuaban en el mismo lugar. Se situaban en un camino de tierra próximo a la estación de trenes de Blanes, donde esperaban las víctimas; a menudo, jóvenes o personas de edad avanzada. Una vez allí, las abordaban, las amenazaban con un cuchillo o una navaja y les sustraían los teléfonos y objetos de valor que llevaban. En total, la policía los acusa de cinco robos con violencia e intimidación. El primero pasó el 7 de noviembre hacia las dos y media de la noche, cuando los ladrones echaron por tierra a un hombre de edad avanzada. Lo amenazaron, le sustrajeron la cartera y el móvil y se marcharon corriendo. Dos días más tarde, los multirreincidentes volvieron a actuar. En esta ocasión, hacia las nueve y media de la noche, golpearon a un joven, lo amenazaron con un cuchillo y le tomaron el teléfono móvil. El tercer atraco ocurrió el 12 de noviembre a plena luz del día. Hacia las tres de la tarde, y siguiendo el mismo modus operandi, los ladrones agredieron a una joven a quien también le robaron el móvil. Al día siguiente, prácticamente a la misma hora, abordaron y hicieron caer al suelo a una menor de edad, a quien le tomaron la mochila escolar y el móvil. El último robo ocurrió el 19 de noviembre hacia las diez de la mañana. Ahí, la víctima fue un joven, a quien le sustrajeron el móvil tras amenazarlo a punta de navaja. Los Mossos d’Esquadra abrieron una investigación y, junto con la Policía Local de Blanes, consiguieron identificar a los dos ladrones. La policía, sin embargo, no los pudo localizar porque no tenían domicilio conocido, y por ello se emitió una orden de detención. Martes de la semana pasada,
la policía francesa atrapó a uno de los ladrones. Tras entregarlo a la Policía Nacional, el CNP lo traspasó a los Mossos d’Esquadra . I l’endemà, els mossos van poder arrestar el segon delinqüent a Blanes mateix. Quan l’anaven a identificar, el lladre va provar de fugir i es va posar a córrer, però els agents el van poder interceptar i el van detenir. Els arrestats, amb múltiples antecedents per fets similars, van passar a disposició judicial davant el jutjat d’instrucció en funcions de Blanes.