Ayer por la tarde, a las 19.12 horas, se activó un operativo de rescate en la zona de rocas de la cala del Vigatà, en Sant Feliu de Guíxols, después de que un chico hubiera caído de una altura de entre 6 y 9 metros. Debido al mal estado del mar, el rescate marítimo no era viable, por lo que se movilizó el helicóptero medicalizado.
Además, se desplegaron tres dotaciones terrestres de los Bomberos, junto con el Servicio de Emergencias Médicas, y proporcionaron la primera atención al herido. Los equipos de emergencia inmovilizaron al chico y realizaron la extracción en camilla mediante un grúaje desde el helicóptero. Posteriormente, el herido fue trasladado al puerto para recibir atención médica.
Afortunadamente, gracias a la rápida actuación de los servicios de emergencia, el chico pudo ser atendido con celeridad. Las autoridades recuerdan la importancia de la seguridad en las zonas costeras y piden precaución a la hora de practicar actividades cerca de las rocas.