Los Mossos d’Esquadra han detenido a un hombre de 54 años que dio positivo en alcoholemia tras tener un accidente con la furgoneta de empresa en Serinyà (Pla de l’Estany), rompió la trampa del vehículo y lo quemó en medio de un campo.
Los agentes lo arrestaron por un delito de atentado a agentes de la autoridad porque se abrazó sobre ellos y les amenazó cuando lo echaron prendiendo fuego al vehículo.
También lo han denunciado penalmente por conducir. Los hechos ocurrieron este jueves en la C-66 hacia las cinco de la tarde cuando los agentes recibieron el aviso de un accidente entre dos furgonetas.
Al llegar, comprobaron que había pocos daños materiales, pero, al hacer la prueba a los dos conductores, descubrieron que el causante del siniestro presentaba una tasa de 0,98 mg/l de aire expirado.
Por este motivo, le inmovilizaron el vehículo, que era de la empresa para la que trabajaba, y le abrieron diligencias penales como presunto autor de un delito contra la seguridad vial por conducir un vehículo con una tasa penalmente punible.
Un rato más tarde, los agentes fueron alertados de que el hombre había roto la trampa, se había marchado con la furgoneta y había circulado hasta el medio de un campo.
Cuando los agentes llegaron encontraron la furgoneta quemando y localizaron al conductor.
El hombre se abrazó sobre ellos mientras los amenazaba.
Ante ello, los mossos lo detuvieron por atentar contra los agentes de la autoridad.
El arrestado, que no tenía antecedentes, pasó a disposición del juzgado de guardia de Girona al día siguiente de los hechos.