El sector hotelero podría sufrir nuevamente por una subida de la tasa turística, donde el precio variaría según la ocupación en el país. Así lo ha confirmado el ministro de Turismo y Comercio, Jordi Torres, durante la festividad de Sant Romà de Vila, donde también ha destacado que “de forma consensuada con el sector turístico habrá esta posibilidad de que se revise la tasa turística”. La idea es poder hacer un estudio de la carga turística para ver los meses de mayor afluencia de visitantes y definir los nuevos precios del impuesto.
Según ha expresado Torres, la idea es poder hacer un incremento donde el importe actual se multiplique por 1,5. Como corte de ejemplo, si un hotel de cinco estrellas tiene la tasa turística a tres euros, con la aprobación e implementación de la nueva ley, en temporada alta pasaría a ser de 4,50 euros. “Es una propuesta que está sobre la mesa, pendiente de que se acabe de ajustar y sea consensuada con el sector según la situación turística del país” ha incidido.
La propuesta, sin embargo, no se ha visto “ni con alegría, ni tampoco con preocupación”, ya que los datos demuestran que no ha habido ninguna afectación o descenso de la afluencia turística en el país desde la implementación de la primera ley de la tasa turística. “Hay que hacerlo por ley” ha comentado.
La nueva ley está ahora en una fase de elaboración, la cual se prevé que se pueda tener a finales de julio para presentarla a los grupos parlamentarios y empezarla a trabajar. Antes, sin embargo, un equipo de ONU Turismo volverá a viajar a Andorra a finales del mes de junio para poder trabajar sobre esta propuesta. “La idea sería aprobarlo en otoño de este año. En octubre o noviembre puede ser un buen periodo” ha concluido Torres, declarando que la voluntad es que entre en vigor durante la temporada alta.