Los hornos de las pastelerías andorranas ya se han puesto en marcha para producir los paneles. La celebración de la castañada está a punto de caer y en muchos establecimientos ya han empezado a hacer las primeras ventas de estos pasteles típicos de las regiones de habla catalana. De momento las ventas van a un ritmo tranquilo, pero los pasteleros del país esperan que a lo largo de esta semana los compradores se animen al adquirirlos. Este dulce de otoño sigue muy presente en la sociedad andorrana, a pesar de la proliferación, y cada vez más, de la celebración del Halloween entre los jóvenes.
“Están comprando, la semana pasada ya hicimos algunas ventas”, han explicado fuentes de la pastelería Obrad’or by 180. Cuando todavía faltan unos días para que se consuman, el jueves es la celebración de la castañada y el viernes es Todos los Santos, parece que el ritmo de compras no es tan alto “como el año pasado”, pero con el paso de los días la previsión es que “se animará”, han detallado desde este establecimiento de Andorra la Vella. Desde el Obrad’or by 180 comentan que el precio de los paneles no ha variado mucho respecto a los del año pasado, lo que los clientes no se encontrarán demasiadas diferencias.
Desde la pastelería De Lisi Ós, de Escaldes-Engordany, también han relatado que la semana está “siendo tranquila” en cuanto a las ventas porque la gente “siempre va a última hora”, ha mencionado la pastelera de este establecimiento, Mar Castro. “De momento la gente va picando, pero el plato fuerte será a finales de semana, aquí subirán las ventas”, ha declarado Castro. En este espacio ya empezaron a ponerlos en el mercado a comienzos de septiembre y durante este mes ya hicieron unas primeras ventas. “A la gente les sobraba, pero siempre había alguien que se acababa llevando tres o cuatro”, ha mencionado la trabajadora de la dulcería.
En la panadería de Pyrénees tienen la intención de producir cerca de unos 250 kilogramos de paneles para este año, una cifra similar a la del año pasado. Desde el centro comercial aseguran que las previsiones son muy buenas porque a principios de mes ya recibieron las primeras compras. “A principios de octubre ya empezamos, pero en los últimos días es cuando habrá más ventas”, manifiesta el jefe de la panadería de Pyrénees, Gustavo Ruhl.
Cada vez la celebración del Halloween está cogiendo más embrague en el Principado. Se puede apreciar con los adornos de algunos escaparates de tiendas, de empresas o incluso en algunos balcones. También se puede observar en la calle, ya que por ejemplo algún día se ha podido ver a algún joven disfrazado con indumentaria típica de esta celebración anglosajona.
Sin embargo, la tradición de comprar panellets no está decayendo estos últimos años, tal y como apuntan desde la pastelería De Lisi Ós. “El auge del Halloween es más de niños y adolescentes, los paneles y las castañas son más de los adultos y lo respetan”, ha indicado Castro. Ruhl también se muestra en la misma línea, ya que considera que la tradición de consumir panellets está muy arraigada en los territorios de habla catalana.