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En el límite entre L’Ampolla y Amposta, dentro del entorno natural del Parque Natural del Delta del Ebro, se levanta un alojamiento turístico que está haciendo furor en la zona. El Castell Granadella, una antigua fortaleza catalogada del siglo XII convertida ahora en un acogedor hotel rural, ofrece a los visitantes una experiencia única donde la historia y la naturaleza se funden con paisajes diversos y con el confort.
Un castillo con alma restaurado con cuidado
La finca del Castillo Granadella conserva parte de su estructura medieval original, destacando una torre emblemática y muros de piedra del hotel, que hablan de su pasado defensivo. Este caserío señorial ha sido restaurado durante cinco años, de forma meticulosa en un proyecto familiar que combina la elegancia de época con las comodidades actuales. El resultado es un alojamiento con encanto, que mantiene intacta la esencia del edificio original, ofreciendo a los huéspedes una inmersión en la historia local sin renunciar a la modernidad.
Un entorno privilegiado y servicios para todos los gustos
Situado a pocos minutos de puntos de interés como la Torre de la Granadella y el Centro de Interpretación del Arroz, y muy cerca del Mirador de la Balsa de les Olles, el Castillo Granadella es un punto de partida idóneo para explorar el Parque Natural del Delta del Ebro.
Con 10 habitaciones amplias y decoradas con mobiliario de época, la casa rural destaca por su atmósfera acogedora y romántica.
Entre los servicios que ofrece hay una piscina exterior rodeada de bosque, un jardín amplio, un jardín amplio para los clientes con alquiler de bicicletas, catas de vinos, y visitas guiadas al castillo, al museo y al delta.
También permite el alquiler exclusivo de toda la finca para grupos y eventos privados, como ya se ha hecho con el grupo Sopa de Cabra o conocidos chefs locales con estrella Michelin.
Una escapada que combina cultura, naturaleza y descanso
Con una puntuación media de 8,6 en portales como Booking, el Castillo es un entorno único y natural que permite disfrutar de la cultura y tradiciones de las Tierras del Ebro mientras se descansa en un ambiente relajado y elegante.
Con estación de tren, a 70 km del aeropuerto de Reus y con fácil acceso desde Barcelona, el Castell Granadella invita a descubrir la misadel Delta del Ebro desde un lugar donde el pasado medieval convive en perfecta armonía con el presente.
