Esta mañana, el alcalde de Tortosa, Jordi Jordan, la concejala de Servicios, Marga Abelló, la concejala de Turismo, Sònia Rupérez, y el jefe del área de Servicios, Gerard Boldú, han realizado una visita de obras a uno de los dos estacionamientos disuasorios previstos en el proyecto, entre el fortín de Orleans y el antiguo edificio de la escuela Betània. El otro aparcamiento se encuentra en el campo de la Creueta de Remolins y ya dispone del guarda-bicicletas y de la instalación de placas solares en el techo.
Así pues, Jordan ha recordado que “el objetivo de estos aparcamientos es que puedan dejar aquí sus vehículos y coger las bicicletas para desplazarse por los diferentes espacios fortificados de la ciudad como Orleans, la colina del Sitjar, el portal de Tarragona, el fortín d’en Bonet, las Avançades de Sant Joan, el Castell de la Suda y la Creueta”.
Ahora mismo se están haciendo los trabajos de compactación y de adecuación del pavimento, la habilitación de varias cunetas vegetables a su alrededor para retener las aguas pluviales y evitar la erosión de las fortificaciones, la instalación de las marquesinas con placas solares, la separación de los aparcamientos con barreras de madera, el alumbrado y la instalación de un punto de agua.
La obra tendrá un coste de 529.980 € financiados íntegramente por los fondos europeos del Next Generation y ahora mismo se han ejecutado unos 200.000 €. Las obras se llevan a cabo en el marco del Plan de Sostenibilidad Turística en Destinos y están subvencionadas por el ministerio de Industria, Comercio y Turismo del gobierno español.
Próximamente también se iniciará la señalización horizontal y vertical de todo el recorrido cicloturístico donde también habrá una señalización específica de un carril bici de unos tres kilómetros. Este carril bici no será como los habituales porque se debe compartir el espacio en muchos tramos con el tráfico rodado, calles estrechas y las entradas y salidas de chalés y urbanizaciones. También se renovará el arbolado y la jardinería y se eliminarán especies vegetales invasoras de las murallas.
Además, también se está en proceso de adjudicación de un servicio de trenecito turístico eléctrico y 100% sostenible que tendrá dos vagones de 28 plazas cada uno y que su locomotora será una imitación del mítico tren de Lo Carrilet de la Cava que daba servicio a la ciudad de la Revolución Industrial entre los municipios de Tortosa y Deltebre. Desde hace años, la locomotora original se conserva rehabilitada y restaurada en medio de la entrada del parque municipal Teodoro González y está declarada como Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN).
Jordan ha dicho que “este tren debe permitir acercar a los turistas desde el centro de la ciudad al casco antiguo y a sus principales monumentos, así como alargarlo hasta alguna de las partes del Circuito Verde de las Murallas. No recorrerá todo el circuito porque sería imposible por los desniveles del terreno, pero llevará a los turistas a diferentes lugares para que puedan continuar a pie el resto del circuito”. El tren estará operativo durante todo el año. Se está esperando que salga la adjudicación durante las semanas próximas y se ofrecerá a concurso público su gestión. El tren también ha sido financiado íntegramente por los fondos Next Generation con un coste de 427.916,50 €.
Una apuesta que va en la línea de la propuesta del consistorio para poder ser reconocidos por parte de la UNESCO como patrimonio mundial, junto con otras ciudades del mundo.
