Un hombre ha sido absuelto de agresión sexual, pese a que el fiscal pedía nueve años de prisión y que era el primer caso en el que la víctima había conseguido acreditar, mediante un test, que estaba bajo los efectos de la sumisión química cuando ocurrieron los hechos, según Prensa Ibérica.
La Audiencia de Madrid, sin embargo, acaba de absolverle tras concluir que el hombre «había bebido» la noche de la presunta agresión sexual y pudo no ser «conocedor de la falta de consentimiento» a tener relaciones sexuales por parte de la víctima.
Según el fallo de la Audiencia, “no consta que la mujer no prestara su consentimiento” y ello a pesar de que «no era consciente de dichas relaciones debido a una previa intoxicación con benzodiazepinas, THC (cannabis) y cocaína».
LOS HECHOS
La mujer, una farmacéutica madrileña de 31 años, denunció a un auxiliar de vuelo que había conocido en una discoteca de la capital de España por los hechos ocurridos en noviembre de 2019.
Según explica la mujer, tras beber un chupito de tequila, vomitó varias veces para acabar perdiendo el conocimiento. Cinco horas después se despertó despachada en su cama, aturdida para ver, horrorizada, que alguien la estaba penetrando “creo que sin preservativo”, declaró la víctima.
“Yo no podía sentir absolutamente nada”, declaró la chica ante la policía y del juez. Cuando recuperó plenamente el conocimiento, fue a la farmacia donde trabajaba en hacerse un test de drogas que dio positivo en benzodiazepinas, THC y cocaína.
Acudió a la Policía y envió agentes de la Policía Científica para aprender muestras y recopilar pruebas en su casa.
ABSUELTO A PESAR DE LAS PRUEBAS
En la sentencia dictada el 16 de enero pasado, los tres jueces afirman que aquella madrugada fue el hombre quien contactó con la denunciante en la discoteca, que la llevó después a su casa y que tuvo que «ayudarla a subir» al piso por el estado en el que estaba la chica.
Una vez allí, «tuvo relaciones sexuales» con la joven, «sin que conste que ella no prestó su consentimiento». Todo ello, aunque la resolución reconoce que la chica «no era consciente de dichas relaciones debido a una previa intoxicación con benzodiazepinas, THC y cocaína».
Los magistrados no dan por probado que fuera el acusado quien drogó a la víctima aquella noche y concluyen que el hombre podía desconocer que la mujer «tenía sus facultades mentales y volitivas anuladas».
Los abogados de la víctima recurrirán contra esta sentencia judicial.