Un centenar de familias que son usuarias habituales del camping Sant Salvador, de Coma-ruga, han recibido de manera inesperada una carta certificada de la nueva gerencia del camping donde se les notifica la no renovación del contrato de estancia para la temporada 2023-2024. Una terrible noticia, ya que muchas familias utilizan las instalaciones desde hace más de 40 años.
Además de no renovarles el contrato, les están amenazando con tirar y destruir las pertenencias si en el plazo de 30 días no las van a buscar.
Las familias han emitido un comunicado donde piden a la nueva propiedad que reconsidere la decisión que afecta a un centenar de familias. Además, añaden que se les permita abandonar las parcelas con un tiempo razonable y justo. Además, se muestran indignados porque dicen que la nueva propiedad ha actuado de manera poco elegante y poco proporcional. ”Tenemos 30 días para poder sacar 40 años de vida, cuando, en realidad, son unas horas al día de los 3 fin de semana que nos permite entrar y vaciar nuestras cosas”, expresan.
Los usuarios y usarías lamentan las formas como los han tratado y se sienten realmente dolidos por no recibir ninguna explicación por parte de la gerencia saliente. Además, denuncian que la gerencia les animó a comprar las casas móviles del camping, que hasta el momento solo se alquilaban, no hace más de un año, y adaptarlas estéticamente con el fin de dar una mejor imagen del camping. Las familias han realizado un desembolso de entre 20.000 y 30.000 euros por familia.