El Ayuntamiento de Calafell ha iniciado la instalación de placas fotovoltaicas en los techos de dos equipamientos: la escuela del Castell y el Mercat Vell.
La inversión es de 268.833,86, financiada con fondos europeos Next Generation, dentro del Plan de recuperación, transformación y resiliencia.
Hace dos años, el Ayuntamiento ya impulsó una primera actuación como esta, en el pabellón municipal Joan Ortoll y anunció que los dos proyectos actuales vendrían a continuación.
Esta línea de trabajo tendrá contunuidad en otros equipamientos públicos, particularmente en el núcleo de Segur de Calafell.
Segun un estudio realizado, la superficie utilizable puede llegar a generar hasta 100 kilovatios de potencia.
La electricidad obtenida será consumida por los mismos edificios que acogen las placas, pero la intención es que pueda nutrir también otras instalaciones municipales.
En concreto, un 20% de la energía generada podrá destinarse a otros equipamientos que estén a menos de 500 metros.
Y, efectivamente, a poca distancia de los tres emplazamientos elegidos hasta ahora hay guarderías, instalaciones deportivas, oficinas municipales e incluso el propio edificio del Ayuntamiento.
“La apuesta por las energías renovables debe hacerse por criterios ambientales y de sostenibilidad, pero no podemos obviar que reducir el coste del consumo eléctrico es importante, más aún de las recientes experiencias de precios disparados”, dice el concejal de Ecología Urbana, Aron Marcos.