El Ayuntamiento de Reus ha aprobado el proyecto ejecutivo de la nueva guardería municipal L’Ametller. El centro dispondrá de 8 aulas con capacidad para 134 niños. Se levantará dentro del actual recinto de la escuela Eduard Toda, que dispone de espacio suficiente reservado para usos educativos como para acoger el nuevo equipo.
La ubicación, en la zona sur de la ciudad donde se prevé un importante crecimiento en los próximos años, permitirá generar una manzana educativa completa, del servicio educativo de 0 a 16 años, formada por la nueva EBM, la escuela de primaria Eduard Toda y el instituto de secundaria Roseta Mauri.
El proyecto fija un presupuesto para ejecutar las obras de 2.867.651,81 euros (IVA incluido) y un plazo de 12 meses. La redacción del proyecto ejecutivo ha corrido a cargo de Cor Asoc SL, por un importe de adjudicación de 87.725 euros (IVA incluido).
El proyecto apuesta por una arquitectura ancha, transparente y luminosa, adaptada al contexto climático, poniendo en valor la eficiencia energética, la sostenibilidad material y la calidad ambiental como pilares de su relación con el entorno.
Descripción del edificio
El vestíbulo es el espacio central. En el norte se disponen los despachos de dirección y administración, la sala de docentes, el office, los servicios y la sala de usos múltiples; mientras que en el sur se accede al aula de niños de 0 a 12 meses. Por el este, el vestíbulo conecta con el pasillo de acceso al resto de aulas. Este espacio recibe iluminación natural.
Los despachos de dirección, administración y la sala de docentes están separados del vestíbulo por cierres transparentes que favorecen la visibilidad y la comunicación entre personal y familias.
A continuación se encuentra la zona de cocina y office, con acceso directo desde el vestíbulo. Las cámaras higiénicas son accesibles desde el vestíbulo general.
Las aulas se orientan al sureste y se abren en el patio principal. Están comunicadas entre sí y con el exterior mediante puertas abatibles, y disponen de un espacio de transición porche de tres metros de anchura que facilita la salida al patio.
Cada aula incluye una cámara higiénica propia, con una ventana orientada hacia el aula y otra hacia el pasillo, para garantizar una buena iluminación natural, especialmente desde el patio interior.
El pasillo que da acceso a todas las aulas transcurre a lo largo de una crujía central, iluminado naturalmente gracias a un patio longitudinal que acompaña este recorrido.
Relación con el entorno
La nueva escuela se integra de manera respetuosa y armoniosa en el entorno urbano inmediato, priorizando la escala humana y la conexión directa con la naturaleza. El edificio, resuelto estructuralmente con paneles de madera contralaminada, transmite calidez, sostenibilidad y ligereza, y se vincula de manera sensible con el espacio exterior mediante una implantación abierta y permeable.
El diseño favorecen el aprovechamiento de la luz natural y la ventilación. Los grandes ventanales potencian la relación visual y funcional entre los espacios interiores y los patios exteriores. Esta transparencia refuerza la sensación de amplitud y luminosidad en el interior, mientras que los porches de protección filtran la radiación solar, garantizando el confort térmico en todas las estaciones.
Los patios, orientados principalmente hacia el sureste, se conciben como extensiones de las aulas y ofrecen espacios de juego y aprendizaje en un entorno controlado y seguro. La vegetación, sombras naturales y materiales cálidos refuerza la voluntad de crear un ambiente saludable y estimulante para los niños.
Espacios exteriores
La guardería dispone de una amplia zona exterior vinculada directamente con las aulas y organizada de manera funcional para favorecer el juego libre, la experimentación y el contacto directo con el entorno.
El patio principal se extiende longitudinalmente a lo largo de las aulas, garantizando un acceso directo desde cada una. Este patio se encuentra parcialmente cubierto por un porche de transición que protege del sol y de la lluvia, y permite actividades al aire libre durante todo el año.
El diseño del patio combina zonas de juego con elementos fijos, superficies blandas y espacios naturales delimitados por arbolado o plantación, fomentando un ambiente pedagógico rico, diverso y seguro.
Además, se prevé la incorporación de materiales cálidos y texturas naturales que favorecen el desarrollo sensorial de los niños. El porche actúa también como espacio pedagógico exterior, donde se pueden desarrollar actividades tranquilas, lectura, desayunos o talleres.