Esquerra Cambrils no quiere tirar la toalla. Aunque esta mañana el todavía alcalde, Alfredo Clúa, ha anunciado su renuncia, los republicanos creen que todavía hay margen para salvar el gobierno y sus proyectos. “El anuncio no nos coge por sorpresa. Estas últimas semanas intuíamos la decisión. Desgraciadamente, no la compartimos porque supone no continuar con el gobierno. Sabemos que no es fácil gobernar sin una mayoría, pero continuamos defendiendo el gobierno y estamos preparadas para continuar, ser decisivas, dialogar con el resto de partidos y liderar el gobierno“, asegura la primera teniente de alcalde y concejala de ERC, Camino Mendoza.
Los republicanos se muestran “decepcionados” con el alcalde y recalcan que su apuesta era por gobernar en minoría y buscar apoyos externos. En este sentido, afirma que ni ERC ni En Comú Podem han formado parte de esta ronda de contactos para negociar los presupuestos con la oposición. De hecho, Mendoza aclara que el presupuesto está “adelantado”, pero que todavía no está ni cerrado. “Todas las áreas tenían el presupuesto elaborado desde septiembre, estábamos pendientes de que desde recursos humanos se tuviera el coste total para ajustar las áreas. Este paso no se ha podido hacer todavía. Primero teníamos que hablar dentro del gobierno”, señala.
El gobierno municipal ha llegado a esta situación tras expulsar al juntar a Enric Daza el pasado 10 de febrero. Una decisión que tanto Alfredo Clúa esta mañana como Camino Mendoza reivindican. “No fue precipitada, sino meditada con tranquilidad. No era fácil. Éramos conscientes de que nos llevaría aquí, pero por responsabilidad y sentido común se tenía que tomar. No nos arrepentimos”, apunta Mendoza.
¿Nuevas alianzas?
Los republicanos, conscientes de la imprevisibilidad de Cambrils, no han sido nada claros sobre las futuras alianzas. Mendoza solo ha descartado a VOX y no ha cerrado la puerta ni al PP ni a Junts, con quien tenían un pacto hasta hace dos semanas. “Gobiernos en minoría ha habido siempre. La cuestión es encontrar los puntos en común”, subrayó. Con todo, una vez Alfredo Clúa formalice su renuncia ante el Pleno, las opciones son limitadas. A partir de ese momento se tendrá que convocar una sesión plenaria extraordinaria donde, si no hay ninguna mayoría absoluta alternativa, Oliver Klein recuperaría la alcaldía. Teniendo en cuenta que el actual gobierno (ERC-PSC-ECP) sólo tendría la absoluta sumando de nuevo con Junts o con el propio Klein, la decisión de los socialistas sentenciaría prácticamente al gobierno.
Pese al contexto, Mandoza asegura que “no está todo perdido” y que están “abiertos a hablar”. “Creemos que este gobierno es el mejor para el municipio. Cuando el PSC se aclare, los demás miembros del gobierno podremos ver cómo entramos en la posible solución. Para poder mantenerlo, el PSC es clave. Esquerra no habrá sido el primero en sacar el tapón para que se desinfle el barco”, asume.
Tanto republicanos como comunes se enteraron de la decisión ayer a las ocho de la noche a través de whatsapp y no han hablado con el alcalde desde entonces. Mendoza cree que ahora era el momento en que se empezaban a ver “resultados” y están “satisfechos” con el trabajo de este año y medio.
