Llorenç Saudí se despide de la alcaldía de Prades después de un año y medio en el cargo. El socialista dejará ahora paso a la líder de Junts Lidia Bargas, tal y como firmaron en el pacto de gobierno. Hacemos balance con el ayuntamiento de Prades.
En breve, y de acuerdo con el pacto de Gobierno suscrito a principios del mandato, dejará de ser el alcalde de Prades. ¿Qué balance hace de este año y medio en que ha ostentado la alcaldía?
Ha sido un auténtico honor. Siempre he dicho que la ambición más grande que puede tener un hijo de Prades es ser el alcalde de tu pueblo. Este ha sido el caso. Dijo el día que asumé que sería el alcalde de todos y de todas, de los que me votaron, de los que no lo hicieron y de los que no fueron a votar. Así ha sido. En todo momento he entendido que ser el alcalde del pueblo es ser el alcalde de todo el pueblo, sin discriminaciones, ni apriorismos y sin marginar a nadie. Ha sido realmente apasionante. Asumir un compromiso político y ver cómo tu esfuerzo consigue mejorar la calidad de vida de tus vecinos y vecinas es una de las cosas bonitas de la vida. Por otro lado, no dejo mi compromiso político y mis ganas de trabajar para seguir haciendo avanzar a este pueblo. Sencillamente cambio de responsabilidad. Pero como primer teniente de alcalde de Prades seguiré haciendo todo lo que esté en mis manos para seguir sacando adelante el pueblo. Podéis estar seguros.
A menudo se dice que los pueblos pequeños del interior no tienen futuro, que la gente joven marcha, y que está en el litoral y en los grandes núcleos de población donde se juega el futuro inmediato. ¿Está de acuerdo?
Estoy de acuerdo en afirmar que quien dice estas cosas es que no ha sido, ni ha vivido en Prades. Precisamente, una de las cosas que hemos demostrado aquí es que es perfectamente compatible ser un pueblo pequeño orgulloso de su identidad con tener bienestar y servicios municipales de primera calidad. Claro que tenemos futuro. Piense que somos un pueblo milenario que ha superado todos los escollos históricos que hemos sufrido. Lo que tenemos que saber hacer es aprovechar el valor añadido que tenemos para identificar las oportunidades y poder sacarlas adelante.
¿Cómo por ejemplo?
Como por ejemplo el parque astronómico de las montañas de Prades que se ha consolidado con fuerza. Es decir, que tenemos un espacio único para la observación astronómica en el conjunto de todo el país, dado que tenemos unas condiciones de estabilidad del cielo y de la imagen nocturna, obscuridad, climatología y orografía que nos hacen únicos a nivel nacional e internacional. Como por ejemplo ir a todas las instituciones que convenga para explicar nuestra realidad y buscar las ayudas y las inversiones que nos hacen falta para seguir avanzando. Mire, sin ir más lejos, la semana pasada me reuní con el vicepresidente de la Diputación de Tarragona, Fran Morancho, para tratar de una inversión de 70.000 euros en los presupuestos de 2025 para poder comprar unos terrenos precisamente para el parque astronómico de las montañas de Prades. Asimismo, pudimos constatar que gracias al programa de lmpulsDipta Prades recibirá 665.000 euros en los próximos años para poder gestionar estos recursos desde el ayuntamiento y ponerlo al servicio de los vecinos y vecinas. Como verá, esta es la política útil que me interesa porque es la que da frutos tangibles y resultados prácticos. Esta es la vía política que tenemos que seguir recorriendo y la que, humildemente, he intentado hacer crecer para que dé aún mejores resultados.
Un poco al hilo de lo que decíamos antes, usted es alcalde del PSC en un pueblo de las comarcas del interior donde el PSC, precisamente, no tiene su principal fuerza electoral. ¿Qué diría a todos aquellos que podrían considerarlo una rara avis desde el punto de vista político?
Que la única rara avis que hay son aquellos que consideran que el país es un patrimonio suyo. El PSC es un partido nacional catalán, no un partido nacionalista, pero si un partido que tiene una visión de bienestar y progreso social para el conjunto de Cataluña. No sólo por Cornellà, o Santa Coloma o L’Hospitalet, sino también por o Castellar de n’Hug; no sólo por Tarragona, Reus o Salou, sino también por Prades o Vila-rodona. Y quien no entienda esto es que no entiendo lo que el PSC representa y, peor aún, no entiende cuál es la realidad de Cataluña. Por tanto, me siento muy orgulloso de haber sido un alcalde socialista de un pueblo de las comarcas del interior de Cataluña. Orgullosísimo.
¿Cuáles son los proyectos de futuro para prades que usted querría subrayar?
Le decía antes, mi prioridad seguirá siendo ir allí donde haga falta para conseguir nuevos recursos, nuevas inversiones y nuevas ayudas. En este sentido, puedo adelantarle que otro paso adelante en la buena dirección que queremos hacer es habilitar en nuestro término municipal un helipuerto nocturno para poder hacer frente a las emergencias o contingencias que convenga, dada nuestra posición realmente envidiable como cruce de comunicaciones en el conjunto del país.
¿Ve su futuro político más allá de la sala de plenos del Ayuntamiento de Prades?
Reitero lo que he dicho, no he entendido nunca la política municipal como un trampolín para dar el salto a Barcelona, a Madrid o a donde sea. Siempre he considerado que mi máxima ilusión era ser alcalde de mi pueblo para poder trabajar, precisamente, por mi pueblo. La mejor política, en mi opinión, es la que se hace a pie de calle, mirando directamente a los ojos de tus convilatans. No sé qué es lo que nos presenta el futuro, pero sí le puedo garantizar que mi compromiso está al 100% con mis vecinos y vecinas. A los hechos objetivos me remito.
Para terminar, ampliamos un poco el foco, ¿cómo se vive la situación general del país desde un pueblo del interior como Prades?
Creo que estamos en un momento óptimo para seguir avanzando. La llegada de Salvador Illa a la presidencia de la Generalitat ha sido como una especie de bálsamo para recuperar la Cataluña innovadora, trabajadora y líder que es la que ha escrito las mejores páginas de nuestra historia. Tenemos que saber aprovechar la coyuntura. Tenemos un Gobierno socialista en la Generalitat y tenemos un Gobierno progresista en España. A pesar de los ataques enfurecidos de la derecha y la extrema derecha si conseguimos aislar el ruido estéril, debemos saber aprovechar también un momento económico especialmente favorable. Piense que por primera vez en muchos años tenemos un paro a la baja, un récord en el número de trabajadores y trabajadoras inscritos en la Seguridad Social y una perspectiva de crecimiento económico superior a la media de la Unión Europea. Ahora bien, estos datos deben traducirse también en la vida cotidiana de la gente. Y considero que es un acierto que el presidente Illa haya puesto el foco de actuación precisamente en el acceso a una vivienda digna sobre todo pensando en la gente joven. Me siento muy identificado con el presidente. De hecho, lo que él quiere hacer en Cataluña es lo que yo también intento hacer en Prades: una sociedad para todos y todas, sin exclusiones, que sea el máximo de desarrollada en términos de bienestar social y de prestaciones y servicios públicos de calidad.