El diputado de Acción Climática y Transición Energética de la Diputación de Barcelona, Marc Serra Solé, y el alcalde de Manresa, Marc Aloy Guàrdia, han visitado este jueves 16 de enero la nueva instalación de la red de calor con biomasa en la zona deportiva del Congost, que rece ntment ha entrado en funcionamiento. En la visita también ha tomado parte el concejal de Acción Climática del Ayuntamiento de Manresa, Pol Huguet Estrada, y el concejal de Deportes y Salud, Anjo Valentí Moll.
La nueva infraestructura cubrirá las necesidades de calefacción y de agua caliente del Complejo Deportivo del Vell Congost, el pabellón del Nou Congost, los vestuarios y oficinas de la pista de atletismo y el estadio de fútbol del Congost. También el agua caliente de los vestuarios del Congost (junto al rocódromo).
Para abastecer las necesidades térmicas de los cinco puntos, se han instalado dos calderas que funcionarán en paralelo con un sistema de regulación para operar de la forma más óptima según la demanda. La distribución de calor se hace mediante un circuito de tuberías y elementos de seguridad y regulación a lo largo de toda la zona deportiva. Las calderas actuales de gas natural de los diferentes equipamientos se mantienen con el fin de dar apoyo en momentos punta o en situaciones de mantenimiento de las nuevas calderas de biomasa.
Con esta actuación, se prevé generar 1.171.802 kWh al año, rebajar la factura térmica municipal en cerca de 57.000 euros anuales y ahorrar casi 237 toneladas de emisiones de CO2 a la atmósfera. El coste del proyecto es de 1.385.778 euros, de los que la Diputación de Barcelona ha subvencionado 1.247.200 en el marco del proyecto Renovables 2030. El resto van a cargo del Ayuntamiento de Manresa.
La ayuda económica se enmarca dentro de la primera edición del proyecto Renovables 2030, que refuerza el compromiso de la Diputación de Barcelona por la implantación masiva de energías renovables en los municipios de la provincia, la reducción de las emisiones de CO2 y el ahorro energético y económico.
Se trata del proyecto más importante que lleva a cabo la capital del Bages en transición energética. Ha sido impulsado desde la concejalía de Acción Climática del Ayuntamiento de Manresa con el objetivo de potenciar un consumo energético más sostenible. Las dos calderas quemarán astilla proveniente de explotaciones forestales de proximidad. De esta manera, se contribuirá a fortalecer el sector forestal, un sector estratégico que genera empleo en la comarca, y a la vez se reduce el riesgo de incendios en nuestros bosques.