El Servicio Meteorológico de Cataluña concluye que la fuerte ventada del 4 de noviembre en el Port d’Armentera (Alt Camp) fue un tornado. El fiblón se ha cuantificado como de intensidad IF1 (150 km/h ± 20%), según la escala internacional de Fujita. Este es el resultado del trabajo de campo sobre la ventada de origen convectivo, asociada a la tormenta, que se produjo la madrugada del 4 de noviembre en el municipio, y que causó daños materiales. El tornado tocó tierra en el extremo sur del núcleo urbano de El Pont d’Armentera y recorrió dos kilómetros. El fiblón tumbó árboles, vallas y tejas en fincas del sector oeste del núcleo, el cementerio y la zona deportiva municipal. Al norte, arrancó pinos de cepa y se disipó por la Rasa del Pendot.
El estudio de los datos de campo y el análisis de los proporcionados por los diversos sistemas de observación meteorológica, como estaciones meteorológicas automáticas, satélite, radares y detectores de descargas eléctricas, ha permitido concluir que el causante de los daños en el Port d’Armentera, la madrugada del 4 de noviembre, fue un tornado. La zona afectada por el fiblón es una franja de 2,1 kilómetros de longitud y de 90 metros de anchura. Tocó en el suelo a las 4:16 horas y se disipó tres minutos más tarde.
Primer tornado desde 2017
Hacía siete años que la comarca del Alt Camp no había sido afectada por un tornado. El último registro es del 18 de octubre de 2017, entre los términos municipales de Vallmoll y Valls. Se produjo en el contexto de una línea de tormentas, acompañadas de rachas muy fuertes de viento que afectaron, sobre todo, al Camp de Tarragona. Los daños fueron más destacables y abarcaron un área más extensa.
Segundo fiblón del otoño
En cambio, el tornado del 4 de noviembre en el Pont d’Armentera és el segundo fibló de este otoño. El otro caso se registró el 17 de octubre en el término municipal de Mura (el Bages). Afectó a una zona forestal situada en el Parque Natural de Sant Llorenç del Munt y L’Obac.
Según datos del Meteocat de los años 2000 al 2023, entre los meses de agosto y noviembre se concentra el 68% de los tornados registrados en Cataluña. En promedio, cada año se registran entre 5 y 6 en el país, la mayor parte de los cuales son débiles, de intensidades inferiores a IF2, según la escala internacional de Fujita. También se suelen observar entre 15 y 20 trombas marinas frente a la costa catalana cada año.